El pago de una hipoteca ya supone menos esfuerzo que alquilar en Segovia

Los hogares segovianos cada vez experimentan mayores dificultades para hacer frente al alquiler de una vivienda. A principios de junio, cada familia residente en un piso de Segovia capital tenía que destinar un promedio del 31% de sus ingresos mensuales a este gasto. Ya llega a superar el umbral máximo recomendado, ya que lo ideal es gastar el 30% en concepto de vivienda. Es una premisa protagonista entre los consejos que aportan los agentes inmobiliarios.

Hace tan solo un año, el abono del alquiler mensual requería un esfuerzo también elevado, pero se reducía al 25%. El incremento por tanto es destacado, según recoge un estudio publicado por el portal inmobiliario Idealista. La demanda de pisos en renta en la ciudad es creciente, lo que repercute en el aumento de los precios y recorta aún más el poder adquisitivo de las economías familiares.

Un núcleo residencial formado por una pareja de mileuristas censada en la ciudad debe abonar ahora alrededor de 620 euros de media con motivo del alquiler cuando hace tan solo doce meses afrontaban un gasto de 500 euros. Este repunte se traduce en que el ahorro de los hogares disminuye en hasta 1.400 euros de media al año. Y la cuantía se dispara si la comparativa se hace con rentas más elevadas.

El portavoz de la entidad responsable de estos datos, Francisco Iñareta, advierte de que esta situación se debe a la «persistente falta de oferta disponible», lo que tensiona los mercados. Los anuncios de alquileres proliferan, pero los más económicos desaparecen en pocas horas. Muestra de ello es que Segovia se haya instituido como una de las capitales donde más cuesta sufragar los gastos de vivienda.

Tan solo es superada por grandes ciudades como Barcelona, donde hay que destinar un promedio del 46% de los ingresos para sufragar el alquiler; así como Palma de Mallorca (45%), Málaga (42%), Valencia (41%) o Madrid (38%). La actualización de porcentajes coloca a Segovia al mismo nivel que Bilbao, San Sebastián o Las Palmas de Gran Canaria en lo que respecta al esfuerzo económico.

Ya es mucho más rentable costear una hipoteca. Hacer frente a cada cuota supone destinar una media del 21% de la nómina. Son diez puntos porcentuales menos en comparación con el alquiler y es un dato que no ha presentado variaciones respecto al mismo periodo del año pasado. Todo ello incluso cuando la ciudad aqueja una falta de promociones de obra nueva, y el mercado de la vivienda usada tampoco llega a ser amplio.

No hay visos de mejora de la situación, al menos en el corto o medio plazo. «Lamentablemente, la construcción de viviendas se demora años», estima Iñareta. Pese a ello, Segovia se convierte en una de las capitales donde más compensa adquirir un inmueble, incluso si la financiación conlleva el pago de intereses. Es una ciudad que comparte idénticas condiciones con Santander o Pontevedra, donde abonar una hipoteca cuesta la mitad que en Málaga (38%) o Palma de Mallorca (44%).

La situación en la provincia es muy diferente. El porcentaje de la nómina destinado al pago del alquiler se modera respecto a la capital, hasta situarse en un 26%. Es un indicador que refleja a su vez la evolución del mercado inmobiliario en el medio rural, donde también se ha disparado el esfuerzo que deben hacer los arrendatarios, ya que en junio de 2023 se situaba dos puntos por debajo. El aumento del montante necesario para pagar las cuotas hipotecarias sí llega a percibirse en este plano territorial, al pasar del 12% al 14%, un dato que se encuentra en la media del conjunto nacional.