Los operarios logran desatascar el colector del Eresma y restablecer su funcionamiento

La Concejalía de Obras y Servicios del Ayuntamiento de Segovia, con la colaboración de empresas auxiliares externas, logró desatascar el colector del río Eresma tras un importante problema detectado el sábado, según recoge Ical. Durante tres días se trabajó hasta conseguir, a media tarde de este lunes, el restablecimiento del paso del caudal y cesar los vertidos al río, afirmó el concejal del área, Miguel Merino.

Merino también sostuvo que durante las próximas jornadas se van a mantener las labores de limpieza por lo que «se tardará unos cuantos días en tapar los agujeros que han sido cuantiosos y voluminosos». En el punto en que se produjo el atasco por acumulación de numeroso residuos, algunos tan llamativos como blísteres de medicamentos o pelotas de tenis y pádel, vierten agua el barrio de San Lorenzo y los municipios de San Cristóbal de Segovia y La Lastrilla.

Durante el fin de semana, ya se descartó el barrio de la ciudad donde ya se hizo una limpieza hace unos meses. «La población del barrio de San Lorenzo no alcanza para justificar este incidente», expuso el consistorio en su perfil de Twitter, por lo que el concejal explicó que se trabajará en la revisión de los convenios con estos ayuntamientos para que haya mecanismo de control que podría pasar, por ejemplo, por hacer tratamientos previos en el punto de vertido al Eresma.

El atasco se detectó el sábado por la mañana y se intentó solucionar el problema con agua a presión para que volviera el flujo, pero no funcionó. En la jornada de este lunes se incorporaron máquinas para identificar el punto donde se creía que estaba obstruido el colector y, finalmente, los trabajos dieron sus frutos para poder dejar todo canalizado.

Además de una gran cantidad de toallitas, compresas o pañales, el concejal llamó la atención sobre el hallazgo de vertidos como «un número bastante cuantioso de pelotas de tenis y pádel». Una información que se da a la ciudadanía para que «conozca los daños y los costes que este tipo de vertidos produce». También se confirmó un vertido de sangre procedente de un matadero de El Sotillo, que pertenece al municipio de La Lastrilla. De hecho, Merino mostró su preocupación por la repercusión medioambiental que vaya a tener este episodio.

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