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En la plaza de Día Sanz hay un cartel muy claro en el que se indica la prohibición de subirse al Acueducto. Que se sepa, al último turista que la Policía Local cazó le cayeron solo 125 euros de multa, aunque el Ayuntamiento de Segovia tiene previsto incrementar la cuantía de las sanciones en la próxima ordenanza reguladora. Durante las dos últimas jornadas, Jueves y Virnes Santo, los casos se han disparado. Los visitantes, ajenos a lo que advierte el cartel prohibitivo, suben y bajan por las piedras como si nada, sin caer en la cuenta de que el Acueducto es un monumento declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y que subirse a él conlleva un deterioro de la piedra milenaria, ya de por sí expuesta a la intemperie. La concejala de Seguridad del Ayuntamiento de Segovia, Raquel de Frutos, asegura que los agentes de la Policía Local suelen vigilar especiamente esta zona, lo que no impide que, puntualmente, puedan darse casos. «Si el agente lo ve, levanta la propuesta de sanción, con toda seguridad. Es un comportamiento inadmisible», apunta la edil. El Ayuntamiento informará en los próximos días de las sanciones interpuestas por este tipo de conductas.
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