Segovia

Los nuevos parques provinciales de bomberos apuntan al segundo semestre de 2024

En cuanto al primero, la edificación del inmueble se ha demorado un poco más debido a una modificación del proyecto original necesaria para la ampliación de la campa, a fin de facilitar la maniobrabilidad de los camiones, la construcción de una serie de naves y la ubicación definitiva de la torre del parque, en cuya erección se trabaja estos días. «En esa fase de perfeccionamiento se encuentra la instalación», asegura Moral.

La obra culminará en plazo, tal y como exigen los tiempos administrativos, pues la infraestructura cuenta con el apoyo de los fondos europeos. No obstante, la recepción de la obra no está supeditada a plazos de obligado cumplimiento, pues no ha habido inyección financiera procedente del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia porque la inversión para construir este parque de Quitapesares ha salido de los recursos propios de la Diputación Provincial.

El proyecto de Quitapesares prevé, entre otras dependencias e instalaciones, la construcción de esa torre para los trabajos de acceso y evacuación por fachadas y escaleras. La edificación principal consta de dos partes bien diferenciadas, por un lado el garaje y por otro las zonas de estancia, con uso mixto, administrativo y vivienda. La idea es que las maniobras y simulacros de actuación en situaciones de fuego y humos lleven a cabo únicamente en el parque de Palazuelos de Eresma, por lo que en el de Boceguillas solo se ha construido la nave propiamente dicha, que consta de dos plantas, para poder ejecutar un edificio lo más compacto posible.

De esta manera, este parque del nordeste tendrá el garaje y sus dependencias auxiliares en la planta baja, y las zonas de estancia en la planta primera. Esta infraestructura de Boceguillas, cuya construcción empezó más tarde que la de Palazuelos, está prácticamente concluida, a la espera de la corrección de errores que los técnicos han detectado, «normales en cualquier obra», apunta el diputado.

Teniendo en cuenta que la Diputación ya adquirió hace tiempo los vehículos del futuro transporte de extinción, aún quedaría por acometer el proceso de dotación del equipamiento interior de ambos puestos de bomberos. «Esperamos sacarlo a licitación la primera semana de enero. Ahí entrarían la equipación de los gimnasios, de las cocinas, de las camas... Equipar un parque de bomberos tiene su complejidad», señala el responsable del Área de Hacienda y Desarrollo Económico de la Diputación de Segovia.

Los parques de Palazuelos de Eresma y Boceguillas serán los centros neurálgicos del servicio provincial de extinción de incendios, atendidos por profesionales, pero la Diputación cuenta a su vez con el concurso de otros diez puestos integrados por bomberos voluntarios de los ayuntamientos y de las comunidades de Villa y Tierra. Siete de ellos serán del tipo 3A y estarán ubicados en Cuéllar, Cantalejo, Sepúlveda, Coca, El Espinar, Riaza y en Santa María la Real de Nieva; y otros tres, de tipo 3B, operarán en Navafría, Ayllón y Fuentidueña.

En la práctica, solo habrá nuevos parques en Palazuelos y Boceguillas porque en los otros diez municipios se utilizarán las instalaciones existentes para almacenar el equipo de extinción de incendios. «Se verá si alguna de las naves necesita una mejora, pero cumplen ya con los requisitos», precisa Moral. De hecho, en varias de estas localidades, como Sepúlveda, se cuenta con el material y el equipamiento suficientes como para poder implantar un parque de bomberos.

Convenios con los ayuntamientos y las comunidades de Villa y Tierra propietarias regirán el uso de estas instalaciones, como se viene haciendo hasta ahora. «Tenemos fijados con ellos un convenio por el que les damos un importe que les sirve para la compra del material. Casi todos cuentan ya con un mínimo de vehículos, aunque no es descartable que alguno de los vehículos ligeros que hemos adquirido pueda acabar en uno de estos parques. Es algo que valoraremos a lo largo del próximo año, cuando tengamos el visto bueno de los nuevos mandos. Los profesionales son los que deben decidir estas cuestiones», añade el diputado.

Lo que se pretende es que los parques profesionales sean el referente y coordinen también todo el entramado de voluntarios de ayuntamientos y comunidades de Villa y Tierra. «Lo único que haremos nosotros, como Diputación, es dotarlos de un material y una cuantía económica para que puedan seguir ayudando y colaborando, pero a partir de ahora bajo el mando de los profesionales, que son quienes tendrán las competencias». Los convenios con municipios y comunidades seguirán, pues, renovándose año a año, adaptados al nuevo servicio. «Los voluntarios son necesarios y seguiremos manteniendo esas ayudas», subraya Óscar Moral.

En opinión de la Diputación, la mejora de las comunicaciones permite que una plaza fuerte como El Espinar esté cubierto con un parque tipo 3A y la cobertura del parque profesional de Quitapesares y que Cuéllar también quede atendida con un parque 3A, con la cobertura del parque profesional de Íscar, gracias al convenio entre las diputaciones de Valladolid y Segovia, que seguirá vigente. Por esta razón se apostó por Boceguillas como sede del segundo parque profesional del servicio provincial: se trataba de garantizar la cobertura de una comarca que no contaba con ella.

Con el servicio diseñado, el diputado asegura que el 99% de la población residente en territorio segoviano estará en tiempos de respuesta bajos ante cualquier incidente que requiera la intervención de los bomberos. De ellos, el 98% son inferiores a treinta minutos, según los cálculos de la institución provincial.

El objetivo es que el 50% de los siniestros pueda ser resuelto en un tiempo inferior a las dos o tres horas. En este sentido, Moral recuerda que la media de siniestros al año registrados en la provincia de Segovia durante los últimos años es de 130, de los que una tercera parte son incendios, otra tercera parte accidentes de tráfico y el resto son auxilios en otros sucesos. «El riesgo de un incendio grave en el ámbito urbano en Segovia es el mismo que el de una inundación en Salamanca», sostiene. La puesta en marcha del servicio provincial de bomberos ideado por la Diputación de Segovia tiene un coste aproximado de 10 millones de euros, que incluyen la construcción de los parques profesionales y la adquisición de los vehículos y el material necesario para el funcionamiento de ambos, así como aquellos que puedan hacer falta en los parques de tipo 3A y 3B.

Óscar Moral no es amigo de hablar de plazos. «Los plazos de la Administración no siempre coinciden con nuestros deseos», argumenta. La Diputación tiene muy claro que el servicio debe empezar a funcionar a lo largo del año 2024, aunque en un principio se pensó en empezar a funcionar en 2023. «La selección del personal nos puede retrasar un poco más. Para más seguridad, hablaría del segundo semestre. En cualquier caso, será a la mayor brevedad posible».