De Vicente, sobre la fusión de municipios: «Aquí tan importante es Perosillo como Cuéllar»

Las palabras del vicepresidente Igea, después matizadas, en las que no veía razonable dar servicios en municipios de 50 personas, han llevado las dudas al PSOE, que en su moción pedía un posicionamiento claro de la Diputación de Segovia. La propuesta socialista pedía a la institución el rechazo radical «a cualquier fusión forzosa o eliminación de municipios o núcleos de población» y que exigiera a la Junta de Castilla y León que ponga en marcha una política propia para afrontar los retos demograficos y deje de crear «escenarios de incertidumbre y estrés institucional en las entidades locales y se oriente a garantizar una mejora de la financiación local que, como mínimo, nos equipare a la media nacional», defendió el portavoz del grupo provincial socialista, Máximo San Macario.

Ciudadanos fue el primero en defender a Francisco Igea. Su portavoz provincial, Ángel Jiménez, dijo que Igea no planteó en ningún momento la supresión de municipios, sino que expresó una «realidad» en todo Castilla y León: la dificultad de prestar servicios en pueblos donde viven menos de 50 personas. «No por repetir una mentira muchas veces se convierte en verdad», dijo comparando la táctica del PSOE con las estrategias propogandísticas de Goebels, lo que ofendió profundamente en las filas de la oposición. Por su parte, el portavoz del PP, José María Bravo, remitió al discurso de toma de posesión de De Vicente como presidente provincial: «Esta Diputación siempre ha tenido muy clara la defensa del municipalismo, y la Junta también. El presidente regional (Fernández Mañueco) ya dijo en la última conferencia de alcaldes que jamás el Partido Popular cruzará una línea roja en cuanto a la unión de municipios. Si los municipios quieren, podrán unirse, pero estamos en contra de que esa unión no sea voluntaria. No creo que sea necesario volver a insistir en un debate que es electoral y demagógico», zanjó.

El socialista San Macario insistió en la réplica y cuestionó el compromiso de los miembros de Ciudadanos con el municipalismo. Tampoco le gustó que fuera la diputada popular María Cuesta quien leyera el manifiesto el pasado 4 de octubre contra la despoblación. «La señora Cuesta, que es una conversa política, porque militó en Ciudadanos cuando este partido hablaba de cerrar la Diputación y los pueblos pequeños...», dijo. El comentario molestó al presidente provincial, que negó que aquella lectura escondiera sesgo político alguno: «Si la señora Cuesta leyó fue porque preside un grupo de Acción Local, Segovia Sur. No vean sesgo político donde no lo hay. Hay vida más allá del puño y la rosa. Además, no den lecciones de gobierno. Hablan de los fondos regionales, pero se les ha olvidado decir que el Gobierno de España podía haber recuperado los planes provinciales». Ni PP ni Ciudadanos apoyaron la moción, que fue rechazada con quince votos en contra.

Por su parte, en la moción de la sanidad en el medio rural, el PSOE pedía instar a la Junta a no retirar ningún facultativo como medida de reordenación de la Atención Primaria Sanitaria en el área rural, así como a dotar de puestos de trabajo suficientes, estables y de calidad para evitar la fuga de talento. Según expuso Máximo San Macario, la Diputación debería pedir a la Junta que elabore un plan estratégico de la Atención Primaria de Castilla y León 2020-2030 que incluya medidas y propuestas específicas para una mejor planificación, dotación, organización y gestión de los recursos humanos y materiales, «ampliando la cobertura sanitaria en el medio rural y creando más unidades de apoyo que cuenten con otros profesionales sanitarios, como fisioterapeutas, pediatras, matronas, trabajadores sociales y psicólogos».

El portavoz de Ciudadanos negó que la consejera de Sanidad haya propuesto en firme el cierre de consultorios en el medio rural y su homólogo popular recordó que la única vez que se han cerrado consultorios médicos en Castilla y León fue en 1986, cuando el PSOE gobernaba la Junta. «Está iniciado el camino, señor Bravo», le replicó San Macario. «Queremos que en nuestros municipios siga habiendo consultorios, con sus médicos, y una atención personalizada y de calidad. Es una seña de identidad irrenunciable», dijo el socialista. «Que sepamos, siguen los mismos médicos y las mismas plazas», replicó José María Bravo. La moción tampoco salió adelante.

No ocurrió lo mismo con la tercera propuesta socialista, referente al cambio climático. A juicio del PSOE, la Diputación debe abandonar de forma progresiva los combustibles fósiles en su parque móvil, apostar por las energías renovables y limpias en las instalaciones e inmuebles de sus centros de trabajo y promover campañas periódicas de concienciación, a través del Consorcio Provincial de Medio Ambiente. Aunque el PP dijo que muchas de estas medidas están en marcha, el equipo de gobierno votó a favor de la moción socialista, aprobada por unanimidad.