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Minutos antes de las 7 de la mañana, medio centenar de tractores tomaron las inmediaciones de la plaza de toros de Cuéllar con el fin de seguir su camino hacia Valladolid. Hasta la capital pucelana tenían previsto llevar sus reclamaciones, porque «estamos hartos de que ... al campo se nos ningunee», tal y como detallaban justo antes de partir en una marcha que no dejaba indiferente ni a viandantes ni a vecinos, pues los agricultores realizaron su camino por la villa haciendo sonar el claxon de sus vehículos, para llamar la atención sobre sus reivindicaciones.
A este medio centenar de tractores se les sumaron minutos después otros tantos, pues su intención era continuar su camino hasta Valladolid tomando la carretera de Olmedo, recogiendo así a los vecinos de localidades del entorno como Vallelado y distintos puntos del Carracillo, como Chañe o Remondo. Seguidamente se dirigieron hacia Íscar, sin llegar al municipio vallisoletano, sino solo hasta el área de Puenteblanca, para cruzar por Megeces e ir sumando vehículos a la marcha. Durante el trayecto se pedía respeto por los derechos de los agricultores, que se mostraban «hartos de las legislaciones que imponen desde los despachos en Bruselas», apuntaba Pablo, propietario de una explotación en Sanchonuño.
«Nosotros lo que queremos es alimentar a todo el mundo y hacer productos de calidad, buen producto; y nos llegan productos de fuera que no respetan las medidas sanitarias que aquí sí que tenemos y que aquí sí que nos exigen», aseguraba, mostrando su hartazgo y el de los agricultores ante la falta de defensa de sus intereses y los del campo español por parte del gobierno.
Para darlo a conocer, no faltaron grandes pancartas instaladas en algunos de los vehículos y que cargaban contra la agenda 2030. 'Nuestra ruina es vuestra hambre', 'Por una agricultura libre y justa' o «Agenda 2030, agricultor perjudicado, consumidor sacrificado' fueron algunos de los lemas vistos en los vehículos. Algunos incluso portaban crespones negros en sus tractores, en referencia al momento que vive el campo.
Aunque las protestas en distintos puntos de la región llevan ya varios días, desde Cuéllar es la primera jornada en la que parten hacia Valladolid. En la provincia de Segovia decenas de tractores se han dirigido hasta la capital segoviana.
Sin embargo, los agricultores no cesarán y aseguraban que «estaremos en la carretera los días que haga falta» como una llamada de atención no solo a los gobernantes, sino también a la población en general. «Queremos que el consumidor y que la población se implique con nosotros», aseveran. Piden el apoyo de todos los vecinos, ya que «somos los que damos de comer y eso la gente lo tiene que entender, y si estamos unos días molestando, nuestra única intención es hacernos respetar y hacer respetar nuestros derechos», concluyen.
Los tractores salieron de Cuéllar acompañados de varias patrullas de la Guardia Civil de Tráfico y de Seguridad Ciudadana, si bien en la localidad no se registraron altercados, sino todo lo contrario, el ambiente que se vivió fue de tranquilidad total e incluso los propios agricultores comunicaron a los agentes el recorrido que pretendían realizar.
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