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El alcalde de Segovia, José Mazarías, lamentó ayer el «profundo disgusto» que sienten todos los miembros de su equipo de gobierno ante las acusaciones recibidas, por parte de la oposición, con el PSOE a la cabeza, en relación con su responsabilidad en la decisión del ... Gobierno de España de dejar a Segovia sin el Centro de Innovación, Tecnificación y Alto Rendimiento de Formación Profesional (CITAR), pues entiende el Ministerio que los metros ofrecidos por el Ayuntamiento en el edificio CIDE no son suficientes para las ambiciones del proyecto.
Mazarías cree que la «puesta en escena» del lunes, con la presencia en Segovia de la secretaria general de FP, Clara Sanz, sirvió para ocultar la realidad, que no es otra que la inexistencia del proyecto, según sus palabras. «El proyecto del CITAR para Segovia ni existe ni ha existido nunca, porque nunca ha tenido contenido ni ha habido intención de ponerlo en marcha. Y el Gobierno de España decidió liquidar cualquier expectativa, si alguna vez la hubo, el mismo día en que el PP asumió la Alcaldía de Segovia. Esto lo sabe la portavoz del PSOE [Clara Martín], consciente de que ese invento no era más que un cebo usado electoralmente una y otra vez desde el momento en que Pedro Sánchez lo lanzó en un congreso regional del PSOE», dijo el alcalde.
El regidor atribuyó a los gobiernos socialistas en el Ayuntamiento de Segovia la «nefasta gestión» del CAT, del CIDE y del CITAR, «que nos han dejado una gigantesca factura de decenas de millones de euros, los que costó el CIDE, impidiendo que ese dinero redundara en inversiones absolutamente indispensables para los segovianos», añadió.
En este sentido, Mazarías tiró de hemeroteca para enumerar las numerosos anuncios fallidos de los anteriores alcaldes en relación con el CIDE: «No creo que se me enfaden si utilizo una de sus palabras favoritas para hablar de los 'caprichos' de Arahuetes y las Claras, cuyo resultado ha sido un gasto de millones a manos llenas y de proyectos 'fake'. El capricho de Pedro Arahuetes fue levantar un complejo desmesurado de once edificios iguales al CIDE con el pomposo nombre de Círculo de las Artes y la Tecnología, megalómano proyecto al que están asociados los nombres de María Teresa Fernández de la Vega y Óscar López. También puedo hablar de los caprichos de Clara Luquero, vendedora habitual de listas de empresas y grandes firmas que nunca vinieron, o de proyectos como el Instituto de Danza Alicia Alonso, o hasta de un centro de investigación del porcino, entre otras ocurrencias que solo eran humo. Y así llegamos al capricho de Clara Martín a fin de que alguien le tendiera una coartada y poder seguir ocultando la falta de capacidad para dar uso al edificio, encontrando apoyo nada menos que en el presidente del Gobierno, con el anuncio del CITAR y la colaboración necesaria de la ministra Alegría y de la secretaria general de FP. Martín ni siquiera respondió a la petición de espacios que el Ministerio le hizo en diciembre de 2022. Y no lo hizo porque todo era mentira».
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Mazarías no tiene intención de dejar sin uso el costoso edificio, pero no por ello lo va a ceder en su integridad a ninguna administración. «Nuestra propuesta pasa por un uso compartido en el que quepa el CITAR, si el Ministerio quiere, además de las oficinas de la Administración municipal y otros servicios. El traslado de los servicios municipales al CIDE impedirá la ruina del edificio y permitirá a la ciudad, es decir, a todos los segovianos, dejar de pagar el alquiler de locales y edificios que ahora ocupan algunos de los servicios del Ayuntamiento».
Para demostrar que el actual equipo de gobierno se interesó por el proyecto del CITAR desde el principio, el alcalde mostró a la prensa numerosas cartas y comunicaciones cruzadas con la secretaria general de FP desde el verano de 2023.
El alcalde asegura que carece de información sobre el proyecto del CITAR, lo que alimenta la incertidumbre. En este sentido, dejó en el aire algunas preguntas que cuestionan los objetivos de un proyecto que el Gobierno defiende para combatir el envejecimiento. «¿Me puede decir alguien cómo se pretende fijar población con este proyecto?
Y continuó: «¿Cuántos trabajadores va a tener? ¿Seis, como han dicho? ¿Durante cuánto tiempo al año? ¿En qué régimen? ¿Qué presupuesto tiene el CITAR? ¿Hay partida desglosada en los Presupuestos Generales del Estado? ¿Se ha estudiado el redimensionamiento que ha propuesto el Ayuntamiento? Porque solo hemos recibido un no, pero ninguna contrapropuesta...».
La secretaria general de FP dijo que el Ayuntamiento no ha entendido el retorno intangible que el proyecto tiene, pero Mazarías asegura que nadie se lo ha explicado. No obstante, deja una puerta abierta al entendimiento. «Puede ser un buen proyecto, aunque nadie nos ha explicado para qué necesitan 1.928 metros en tres plantas. Recojo el guante de la secretaria general y podemos hablar partiendo de cero. De hecho, ya hemos puesto a su disposición toda la primera planta, que son 1.259 metros porque los aseos, los ascensores y los almacenes también cuentan», dijo.
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