Panorámica del barrio de San Marcos desde la plaza de la Reina Victoria Eugenia. a. de torre

San Marcos, el barrio «más bonito» con sus arreglos «a medias»

La asociación de vecinos espera que durante los próximos años se acaben proyectos ya iniciados, como la renovación de aceras o del puente

Laura Lopez

Segovia

Domingo, 18 de abril 2021, 11:41

San Marcos presume de ser el barrio más bonito de Segovia, o al menos así lo hacen desde su asociación de vecinos: «Cualquiera querría vivir en San Marcos», asegura su presidenta, Paloma Herrero, quien por cierto no lo hace. La razón, que el precio ... de las pocas viviendas que hay es muy alto y desde hace mucho tiempo no se construyen más. «No hay muchas casas y las que hay no podemos adquirirlas», comenta Herrero. Las vistas del Alcázar, las zonas verdes, el río Eresma, la iglesia de la Vera Cruz, el santuario de Nuestra Señora de la Fuencisla y el Monasterio Santa María del Parral son algunos de los argumentos que enumeran los que defienden el valor patrimonial de esta zona de la ciudad.

Publicidad

Quizá por ello, a pesar de que diversas circunstancias han propiciado la salida de muchos vecinos de la zona, el arraigo en los corazones de estos segovianos permanece intacto. Y es que aunque apenas viven unos sesenta vecinos en el barrio, la asociación de San Marcos Nuestra Señora de la Fuencisla está integrada por 110 personas.

Ejemplo de ello es la propia presidenta de la asociación, Paloma Herrero, quien asume la máxima responsabilidad de la agrupación vecinal pero vive en Madrona. «Aunque vivamos lejos, nuestro barrio es San Marcos», aclara. Su madre, a pesar de su avanzada edad, no se pierde las fiestas. Sus hijos viven en el mismo barrio incorporado que ella, y sin embargo acompañan al Cristo de San Marcos en Semana Santa y también están en la asociación. Una de ellas es Patricia del Álamo, que también forma parte de la junta directiva de la asociación, al igual que Elena Olmos, que tampoco vive en San Marcos, pero cuida así de él.

El perfil que más se repite entre los vecinos de San Marcos es el de personas entre los 50 y los 60 años y hay muy pocos jóvenes. De hecho, solo hay cuatro que vayan al instituto, según los datos de la asociación. «Casi todos son gente de fuera, de otros barrios de Segovia o de Madrid», explica Paloma Herrero.

Publicidad

Durante este último año marcado por la pandemia, afortunadamente no han lamentado apenas ningún fallecimiento por covid. En este período, desde la asociación lamentan haberse sentido un poco «abandonados» en cuanto al reparto de mascarillas y el acompañamiento de los vecinos. «Nos dieron 50 mascarillas y fuimos repartiéndolas casa por casa y cuando se nos acabaron reclamé más y me dijeron que no, que era una solo para cada uno, y para los más mayores», relata Herrero. «Al final desde la asociación decidimos comprar más para que llegaran a todos».

Una acera reformada «a medias»

Según explica Elena Olmos, en los presupuestos participativos del Ayuntamiento de 2019, el barrio de San Marcos ganó el arreglo de las aceras, una reivindicación detrás de la cual llevaban los vecinos años. Según la agrupación, hacía más de seis años que el Ayuntamiento de Segovia no realizaba «ni un parche». Sin embargo, los 23.000 euros del presupuesto solo alcanzaron para acometer la reforma de una de las dos aceras, por lo que la remodelación se ha quedado a medias. Además, en la asociación no terminan de estar muy conformes porque lo que ellos en realidad querían era quitar uno de los carriles para hacer las aceras más anchas, pues el principal problema del vecindario es que estas son muy estrechas y no puede pasar, por ejemplo, una silla de ruedas.

Publicidad

Vaiandantes pasean por una de las aceras. A. DE TORRE

La idea de la agrupación de vecinos era dejar un solo carril de dos sentidos regulado con semáforos en el tramo desde el restaurante hasta la Huerta de Martín, pero la Policía Local los desaconsejó por cuestiones de movilidad. «Al final han arreglado una de las aceras porque el presupuesto no daba para las dos y han cambiado el suelo, han puesto unas baldosas que son más lisas», ha explicado Olmos. Han cambiado el emborrillado, un pavimento de guijarros trabados con cemento, por granito. Aunque no era exactamente lo que querían en la asociación, reconocen que los vecinos están muy contentos: «Al final se agradece pisar sobre firme», señala Olmos

La reforma del fielato

Otra de las mejoras que celebran en este barrio es la remodelación del fielato, la caseta que antiguamente servía para cobrar impuestos y que ahora podrá utilizar la asociación como sede para realizar actividades. Estas obras, que era una de las opciones candidatas en los presupuestos participativos de 2019, finalmente vieron la luz el año pasado gracias al dinero de las fiestas que no pudieron celebrarse y algo de ayuda del Ayuntamiento.

Publicidad

«No teníamos calefacción, las ventanas estaban muy estropeadas y vacías por las termitas, todo muy antiguo y muy descuidado», comenta Patricia del Álamo. Aunque cuando acaben las obras habrán mejorado mucho las condiciones, hay una cosa que no deja de chirriar a la asociación, que quiere usar la infraestructura para ciertas actividades como clases de yoga: «Queremos que nos quiten un transformador de la luz que hay en la caseta porque ocupa mucho espacio y, además, creemos que no es bueno porque debe emitir radiaciones que no son buenas para las personas que pasan allí el tiempo», comenta Del Álamo.

El concejal de Obras, Miguel Merino, ha explicado que este transformador se encuentra dando servicio actualmente a determinadas zonas del barrio y se trata de una concesión a Unión Fenosa, que ha sido requerida en alguna ocasión para que lo retire, pero que no ha mostrado interés en hacer tal inversión y «el Ayuntamiento no puede obligarle». En cualquier caso, Merino ha señalado que la asociación puede hacer «uso de manera plena» del fielato aun con el transformador dentro, porque está ubicado en un lugar anexo a la caseta: «Estoy convencido de que habría muchos colectivos y asociaciones que les gustaría tener un lugar de encuentro como el fielato, ya sea con transformador o sin él», ha añadido.

Publicidad

El puente

Otra de las cosas que inquieta a la junta directiva de la asociación de vecinos es que hace dos años, en los presupuestos participativos de 2018, se llevó a cabo una serie de mejoras como la limpieza y recolocación de piezas para la ventilación en el puente y la colocación de bandas antideslizantes en la zona peatonal, pero solo dio el presupuesto para llevar a cabo la mitad de la estructura. «Una mitad está limpia y la otra no, se ven las hierbas y la vegetación, como si fuera una selva. Creemos que eso deberían acabarlo», comenta la presidenta de la asociación, Paloma Herrero. El concejal de Obras, Miguel Merino, ha explicado que se pide a los vecinos «coherencia» a la hora de votar los presupuestos participativos porque en 2018 salió la limpieza del puente pero, si con la partida fijada de 14.000 no se consiguió acabar el proyecto, lo lógico habría sido el año siguiente continuar con ello, pero en su lugar de decidió priorizar la cuestión de las aceras.

Más plazas para aparcar y una mejor iluminación

Otra queja que acumula la asociación y que quiere ir acometiendo poco a poco es la cuestión del aparcamiento, que según los vecinos se torna complicado y podría solucionarse dedicando espacio del 'parking' de autobuses de la pradera al resto de vehículos, y la renovación del parque infantil. De esta zona de recreo, que tiene el suelo de arena y cuando llueve se llena de charcos, lo que más les preocupa es una rueda que carece de cualquier sistema de seguridad y que consideran muy peligrosa porque «los niños, si dan muy fuerte, salen disparados», según comenta la presidenta de la asociación, como ya pasó el pasado Viernes Santo, cuando todo se quedó en un susto. También está previsto que se acometa próximamente la renovación del alumbrado en esta parte de la ciudad, como parte de un plan de la concejalía de Obras para lograr una mayor eficiencia energética, ahorro y reducción de la contaminación lumínica gracias a la tecnología LED. Merino ha explicado que otras medidas que están estudiando y que atañen al barrio es la remodelación del paseo perimetral del parque de la Fuencisla, que está hecho con emborrillado y también quieren cambiarlo por granito.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

0,99€ primer mes

Publicidad