Luces y villancicos estrenan la Navidad segoviana

Una nueva Navidad luce ya en las calles de Segovia. La corporación municipal, encabezada por el alcalde, José Mazarías, apadrinó el encendido de la iluminación navideña en el Azoguejo, a los pies del cono de luz de quince metros de altura, que exhibió un vistoso despliegue de colores en presencia de cientos de personas y un coro de voces que entonaba villancicos. A las siete de la tarde, todas las luces navideñas de la ciudad se encendían simultáneamente, y los concejales de la corporación cantaban alrededor del enorme árbol de luz. Así entraba la Navidad en Segovia, a tres semanas vista del comienzo de las celebraciones.

La gente disfrutó del encendido, pero había otro foco de atención: el tan traído y llevado Paseo de la Navidad, situado en el paseo del Salón de Isabel II. Una riada de personas ascendió la Calle Real para llegar a tiempo de la segunda inauguración de la tarde, que tuvo lugar en el acceso a la calle de la Puerta de la Luna, convenientemente tapizada con una alfombra roja. Las luces brillaban abajo, y los niños tiraban de la mano de sus padres para estrenar las atracciones infantiles, el trenecito y el carrusel. El alcalde y los concejales cruzaron el paseo y presenciaron la actuación de los niños y niñas de la Escolanía de Segovia sobre el pequeño escenario habilitado hacia la mitad del paseo del Salón. Dirigidos por María Luisa Martín, los pequeños desafiaron el frío de la noche con la calidez de sus voces. Las casetas de los comerciantes levantaban sus persianas, aunque no todas estaban aún ocupadas.

El equipo de gobierno ha apostado fuerte por el paseo del Salón como espacio central de las actividades navideñas. Y no ha escatimado en reclamos. A la altura de la plaza de las Sirenas, una gran caseta donde se van a vender churros invita ya a descender al Salón. En la embocadura de la calle de la Puerta de la Luna, frente a la iglesia de San Martín, un luminoso da la bienvenida al visitante: Paseo de la Navidad. Otro arco navideño semejante luce a la entrada de la calle Judería Vieja, en el acceso al Salón por la Puerta del Sol. Pero el principal reclamo es el bullicio que llegue de abajo.

En contra de la ubicación elegida para esta Navidad segoviana de 2023 juegan las inclemencias meteorológicas. El paseo del Salón no reúne las mejores condiciones si hay lluvia o nieve, porque el barrizal que se forma en la zona de tierra, precisamente donde están ubicadas las casetas del mercado navideño, hace especialmente incómoda la estancia. Ayer pudo comprobarse perfectamente. El volumen de críticas a la decisión municipal, externas e internas, será proporcional al número de días de lluvia que depare el próximo mes. Salvo que el Ayuntamiento busque alguna alternativa para cubrir el piso. La moqueta no es la panacea, pero amortigua.

En cuanto a la iluminación navideña, adjudicada a la empresa Electricidad Carmelo Plaza, la instalación ha seguido criterios estéticos, patrimoniales y medioambientales, en palabras del concejal de Cultura, Juan Carlos Monroy. «Hemos hecho hincapié en que los elementos ornamentales contengan motivos navideños, de carácter tradicional, como el belén de la plaza Oriental, que hemos recuperado, el pequeño misterio que hay en el balcón del Ayuntamiento o las estrellas que guiaron a los Reyes Magos», apunta. También se ha tratado de que esos elementos sea respetuosos con los monumentos y con el medio ambiente, que no contaminen lumínicamente y estén integrados por luces LED, de bajo consumo.

Los ejes comerciales son las que más iluminación tienen. «La Calle Real, entre el Azoguejo y la Plaza Mayor, el paseo del Salón, epicentro de la actividad del programa de Navidad, y la avenida del Acueducto concentran el grueso de la iluminación, aunque también en los puntos neurálgicos de los barrios, donde hay tanto elementos colgados como en 3D y 2D, clavados en el suelo, que iluminan a la altura de los ojos», señala Monroy. En la Plaza Mayor destaca la iluminación de la fachada de la Casa Consistorial y las guirnaldas que adornan las acacias. La Calle Real tiene veinticuatro arcos especiales y la avenida del Acueducto, nueve de una anchura especial (ocho metros).

No son las únicas zonas iluminadas. La calle José Zorrilla, eminentemente comercial, cuenta con una veintena de arcos especiales. También otras calles del mismo carácter, como Blanca de Silos. En Nueva Segovia se ha decorado el Pirulí; en los barrios de San Frutos y San José, hay palmeras decorativas o portadas con elementos navideños; en San Lorenzo, lucen varios arcos instalados en las calles que dan acceso a la plaza, y en la Fuentecilla también hay algunos adornos, similares a los que se han instalado en los barrios incorporados. La iluminación se completa con los elementos en 3D de la plaza de San Martín (dos copos de nieve), el photocall de tres renos de la Plaza Mayor, el cono de Papá Noel de la plaza de Somorrostro y la decoración de la fachada del mercado de La Albuera.

«Se ha tratado de cubrir todos los espacios que son vías de mayor flujo de público, para que estén bien iluminadas y transmitan esa sensación de Navidad», apunta Monroy. El proveedor, el mismo que ha suministrado la iluminación navideña durante los últimos años, también ha extendido elementos al paseo del Salón, desde ayer convertido en el Paseo de la Navidad. El Ayuntamiento ha destinado este año 83.280 euros, IVA incluido, a la iluminación navideña.

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