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El legado de la Lotería de Navidad pasa de padres a hijos. La tradición de probar suerte en el sorteo extraordinario, que tendrá lugar el próximo viernes, no es cosa exclusiva de mayores. Cada vez hay más jóvenes segovianos que apuestan por comprar décimos, ya ... sea por herencia familiar o para compartir con los amigos y peñas de los pueblos. Las administraciones de la provincia observan un repunte en la venta, lo que se traduce en un aumento del gasto en lotería por habitante hasta superar los 131 euros.
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César Blanco Elipe
Ana María Criado
La ilusión por el Gordo suma cada año nuevos adeptos. Y, en esta ocasión, muchos de los protagonistas son jóvenes. De media, cada segoviano jugará hasta 6,6 décimos en el próximo Sorteo Extraordinario de Navidad. Esa es la previsión que realiza Loterías y Apuestas del Estado-Selae, lo que se traduce en la superación de los 100.000 billetes expedidos, una cifra alta nunca vista, al menos, en los últimos seis años. En 2022, las transacciones ya se incrementaron más de un 2%.
La vuelta a la normalidad tras los peores meses de pandemia, cuando se anotó uno de los peores datos de venta, conllevó al regreso de las reuniones familiares y de empresas. Aunque no hay un perfil concreto de comprador en Segovia, estos encuentros son los que protagonizan los motivos por los que los clientes acuden a las administraciones para adquirir uno o varios números. Los turistas también representan un importante nicho, si bien «hay muchos segmentos y el reparto es bastante equitativo», explica la delegada comercial del Selae en Segovia, Laura López-Caniego.
En el caso de la administración número 1, conocida como 'Los picos de la suerte', la afluencia de visitantes es un indicador de los resultados que va a tener la temporada de lotería navideña. Todo apunta a que se batirán récords. Su gerente, Fuencisla Maroto, destaca que la de Navidad se trata de una lotería tradicional que une a trabajadores y amigos. «Hay muchas personas que quieren jugar el mismo número», asevera, una preferencia que no permite La Primitiva. En esta pretensión, la juventud es protagonista.
Los jóvenes, que deben ser mayores de 18 años para participar en el sorteo, «cada vez se interesan más y cogen más lotería», considera la gerente. Pero sobre todo la de Navidad. «Está funcionando muy bien entre los jóvenes, mientras que, en el día a día, el perfil de comprador es gente más mayor», corrobora Luis Galindo, al frente de la administración número 10, ubicada en Nueva Segovia.
Según el Estudio de Prevalencia del Juego 2022-2023, elaborado por el Gobierno, más del 86% de las personas entre 18 y 25 años afirma haber jugado a cualquier tipo de lotería, lo que engloba la adquisición de décimos, boletos o 'rasca y gana'. «Esta campaña hemos tenido bastante gente que se junta en grupos, en los que cada uno compra un décimo y lo comparten o juegan a medias», subraya Gonzalo Sanz, propietario de la administración de Cantalejo. «Son principalmente jóvenes», puntualiza, pese a que su cliente es mayoritariamente de un vecino del municipio y comarca con una edad superior a los 45 años.
6,6 décimos
de media jugará cada segoviano en el próximo Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad, que se celebra el viernes.
«Aquí somos mucho de jugar entre nosotros, los barrios son muy barrios», especifica López-Caniego. Maroto atribuye la mayor presencia de los rangos de edad más bajos al afán que tienen muchas personas de seguir el legado familiar, además de compartir. En su oficina, los descendientes cumplen cada año con la adquisición del número abonado que mantiene el nombre de sus bisabuelos o tatarabuelos.
La lotería navideña es una fecha marcada en el calendario que «trasciende de padres a hijos». Muchas veces, los décimos se convierten en el símbolo de «arraigo» que tienen algunos jóvenes con sus pueblos y peñas. En lo que respecta a las asociaciones y clubes deportivos, Galindo percibe un descenso en la adquisición de participaciones. «Se está perdiendo mucho; la gente prefiere tener un décimo aunque lleve recargo», puntualiza.
La venta 'on-line' poco a poco logra una mayor relevancia entre la población, pero todavía se prioriza la modalidad presencial. No sorprende que en los últimos meses se hayan producido colas en las principales oficinas de lotería de la capital, incluso antes de comenzar la temporada 'alta'. «La gente se ha dado bastante prisa este año», declara el lotero de Nueva Segovia. En pleno agosto, se agotaron algunos de los números más populares.
Entre ellos, los «más bajitos», especifica Maroto, como el 3, 5, 7 y 15. Con motivo del 250 aniversario de su oficina, se presentó el 35250, en referencia a la conmemoración y a los años que fue regentada por su anterior dueña, Milagros Lago, conocida como 'Chatuqui'. Galindo considera que la terminación más famosa ha sido el 13, «lo que se repite siempre»; así como el 23, con motivo del presente ejercicio. En Cantalejo, los números de abonados briqueros vuelan incluso antes de salir. «Antes de sacarlos, ya lo reservan», como es la serie 'estrella': el 12365.
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