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La provincia de Segovia se dividió en dos mitades en diciembre, con un noroeste más frío y un sureste más cálido de lo habitual. El invierno comenzó con ligeros contrastes que se agravaron según avanzaba la estación, hasta completar un enero que fue «extremadamente cálido» ... en numerosos puntos del mapa, lo que permitió batir marcas históricas. Todo ello sin olvidar las precipitaciones, mucho más abundantes de lo habitual, que se normalizaron en febrero. No sucedió lo mismo con los termómetros.
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César Blanco Elipe
Ha habido días de nieve, si bien escasos, y también de graves inundaciones, a la vez que la niebla fue habitual en las madrugadas, incluso en las jornadas más tórridas. Segovia pasó del frío gélido a la templanza de un clima primaveral en cuestión de horas y en varias ocasiones, lo que ha conllevado a que el pasado invierno se haya convertido en el más cálido de la serie histórica, empatado con el de 2019-2020, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
En algunos momentos de enero la temperatura media en la provincia estuvo 2,5 grados por encima «de lo normal». Hubo días más fríos, aunque tan solo se registraron cuatro avisos de color amarillo por riesgo de frío, todos ellos en la zona de la sierra. El umbral hasta el que deben descender las mínimas para la activación de esta advertencia es de seis grados bajo cero. Este valor era una previsión que no se alcanzó en ningún momento. El valor más bajo fue de -5,1 grados, que se notificó a las 7:50 horas del 25 de diciembre.
Las navidades fueron frías, pero no blancas. Salvo ocasiones puntuales en la sierra, la nieve no alcanzó las cotas más bajas hasta mediados de enero, cuando convivió con el desbordamiento de ríos por las intensas lluvias durante la segunda quincena. De forma general, se han recogido el doble de litros de lo que es habitual en este periodo del año, según el avance climático nacional. La Aemet sitúa una comarca del nordeste de la provincia como la zona con mayor precipitación acumulada de todo el país.
2,5 grados
por encima de lo habitual han registrado los termómetros en algunas jornadas de enero en la provincia de Segovia.
La primavera se dejó ver después de este episodio. En concreto, el día 27 se igualó el récord de temperatura máxima para un mes de enero, al alcanzar los 20,1 grados; y también se batieron las marcas de temperatura media de las máximas más alta (11,3 grados), temperatura media de las mínimas más alta (3,5 grados) y, por último, temperatura media más alta, con 7,4 grados. El anterior valor máximo absoluto databa de 2016, cuando se contabilizaron 6,6 grados.
El inicio de febrero también fue «muy cálido», ya que los termómetros marcaron unos valores que estaban 1,5 grados por encima de lo habitual, así como húmedo, sobre todo en la parte oeste. Más tarde, los copos dieron la bienvenida al mes de marzo, que pudieron verse en la meseta y capital.
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