El Hospital de Segovia, preparado para habilitar otra ala ante el empuje de la covid

Este martes, el complejo asistencial contabiliza una ocupación superior a la que había cuando el gerente lanzaba el aviso. Son 32 los pacientes hospitalizados por la infección. Una presión asistencial al alza que demuestra que la incidencia de la covid va en aumento, afectando especialmente a población de avanzada edad que al propio envejecimiento suma patologías crónicas que la hacen más vulnerable. La edad media de los segovianos internados la pasada semana superaba los 84 años. Sin embargo, también esta embestida del virus aqueja a otras personas que necesitan ser hospitalizados porque la infección agrava enfermedades respiratorias que padecen.

El delegado territorial confirma que el complejo sanitario de referencia en la provincia vuelve a estar preparado para afrontar «el aumento progresivo» de casos que se está produciendo desde hace casi un mes. José Mazarías se detiene por un momento en un dato: este junio empezó a descontar días con trece personas internadas en planta, este martes son 32, un 146% más en 28 jornadas.

No se rebasaba la barrera de los treinta ingresos en planta (al que hay que añadir uno más que recibe asistencia en la Unidad de Cuidados Intensivos por su diagnóstico crítico) desde el 4 de febrero, cuando amainaba la sexta ola de la pandemia que también obligó a buscar y hacer espacio en las instalaciones hospitalarias para atender el aluvión de casos. Hay que retrotraerse casi cuatro meses atrás para encontrar un escenario tan infeccioso.

Así pues, «si se necesita otra ala, se habilitará sin perjuicio a la atención que reciben los ciudadanos». El delegado territorial de la Junta en Segovia hace esta matización porque, de momento, las cifras en aumento de la incidencia de la covid y su traslación a la actividad hospitalaria habitual no afecta ni trastoca la apertura de quirófanos por las tardes para aligerar las demoras quirúrgicas, peonadas que empezaron la semana pasada.

Mazarías demanda cuidado particular en las residencias de ancianos, focos en el que el virus se mueve y se extiende «como una mancha de aceite», como lo definió el gerente de Asistencia Sanitaria y director del Hospital General. Elízaga también incide en los beneficios de la vacunación, lo que ha hecho que la barrera contra la que choca la transmisión del virus sea más fuerte y resistente. Pero también advierte de que ómicron es más escurridiza que el resto de variantes y «se escapa bastante a la vacuna».

La situación dista mucha de la avalancha de casos que desbordó el sistema público sanitario de la provincia en la primera ola de la pandemia, incluso es mucho más contenida que las réplicas que ha habido a lo largo de más de dos años de crisis asistencial por la covid. «Está bajo control», tranquiliza José Mazarías, quien de todos modos recuerda y subraya que el virus «continúa presente entre nosotros».

Desgraciadamente, la realidad le da la razón. En las últimas 24 horas, un paciente con coronavirus ha fallecido en el complejo hospitalario de Segovia, lo que significa que en todo el tiempo de pandemia el centro ha lamentado 435 defunciones relacionadas con la infección. A falta de dos días para despedir junio, en el centro sanitario se han registrado siete muertes asociadas a la covid, una más que las que hubo por ejemplo el pasado mayo o tres más que las padecidas en abril o en marzo, cuando hubo cuatro defunciones de enfermos con coronavirus.