Hundimientos en la calzada de la avenida Padre Claret. Antonio de Torre
José Mazarías | Alcalde de Segovia

«Tiene que haber alguna solución definitiva para Padre Claret»

El regidor confirma que los hundimientos detectados en las últimas semanas obligarán a ejecutar nuevas obras en la calle

Quique Yuste

Segovia

Jueves, 18 de enero 2024, 17:24

El Ayuntamiento de Segovia acometerá durante los próximos meses una nueva intervención en la avenida Padre Claret que tendrá el mismo objetivo que las últimas quince: solucionar los problemas de hundimientos que sufre la calzada. El alcalde de la ciudad, José Mazarías, lo dio por ... hecho este jueves, aunque no precisó ni cuándo se desarrollarán los trabajos ni cuánto tiempo durarán. «Todo parece indicar que va a haber que actuar en ese tramo», declaró.

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El regidor no ocultó su decepción con el estado de la calle apenas ocho meses después de haber finalizado las obras para su remodelación. Pese a ello, Mazarías no se resignó y anunció su intención de encontrar una solución definitiva a los problemas de baches que arrastra la calle desde hace quince años y que han motivado una quincena de intervenciones durante este tiempo. «Me gustaría buscar una solución definitiva. Tiene que haber alguna. No sé si pasa por el material, por el tipo de solución constructiva...», dijo.

El concejal de Obras, José Luis Horcajo, añadió que el gobierno municipal cree que no se trata de un problema estructural de la parte más profunda de la calle, sino de un «problema de composición» de la parte más superficial. Así, y pese a que durante su etapa en la oposición el PP criticó que se modificase el proyecto de la última gran obra de la calle para mantener la losa de hormigón, el edil defendió ahora el buen estado de la misma según la valoración de los técnicos municipales.

Los análisis realizados durante las últimas semanas de los blandones y hundimientos apuntan a problemas en las juntas de dilatación. «Pensamos que puede entrar por ahí más humedad de la que debe. Al estar hechas de una especie de silicona, con la carga de los autobuses los adoquines comienzan a cabecear», detalló Horcajo. Sin embargo, precisó que aún se está estudiando el problema y no hay una solución clara puesta encima de la mesa.

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