Una gran defensa desata la fiesta navera

Tras la derrota de la primera jornada en Granollers, un equipo asentado en los puestos de privilegio en los últimos años, los naveros vivían un examen distinto en la vuelta de la máxima categoría a Nava de la Asunción. Enfrente se encontraba, precisamente, el equipo que acabó con sus opciones de permanencia hace dos temporadas, con su victoria en la última jornada.

Así las cosas, el Nava sacó su mejor carta de presentación desde el inicio. Una gran circulación de balón en ataque y una sólida defensa de 6-0 permitieron a los naveros abrir una pequeña brecha de 3-1 en los primeros cinco minutos de juego. A pesar de la nueva ausencia del flamante fichaje Isaías Guardiola, el juego exterior de Nava siguió carburando y un inspirado Prokop consiguió el 4-1 a continuación.

El conjunto cántabro, que sufrió de inicio, pudo desembarazarse de la presión defensiva navera y comenzó a circular mejor el balón para dar la vuelta al marcador. Marcos Aguilella, desde el extremo, inició esta reacción que se consumó con el gol desde el exterior de Lukas Böhm, quien puso por primera vez por delante a los suyos (6-7).

Una ventaja que solo duró unos segundos y que, a la postre, fue la única de la que gozaron durante el partido. Tomas Smetanka, a toda velocidad, aprovechó sendos robos de balón para poner nuevamente por delante al Nava. Los locales cerraron filas en la defensa 6-0 en torno a un Patotski que, como es habitual, brilló a un gran nivel. Los cántabros se quedaron secos durante cerca de diez minutos y el propio Smetanka, Moyano, Prokop y Mendez estiraron la máxima diferencia a cinco tantos (12-7).

El técnico Rubén Garabaya quiso buscar soluciones a esta sangría pidiendo el primer tiempo muerto del partido. Lukas Böhm rompió la mala racha de su equipo y el partido entró en un período de intercambio de golpes antes del descanso.

El ataque con siete jugadores de Blendio Sinfín permitió encontrar los goles en ataque, pero también concedió que el Nava sumase los suyos con un lanzamiento de Moyano desde su propio campo. Marcos Domínguez, desde el extremo, recortó distancias, pero Pablo Herranz, desde el pivote, recuperó los cuatro goles de distancia antes del descanso.

El paso por los vestuarios no cambió el ritmo del partido, que volvió con un nuevo intercambio de golpes. Guilherme Perbelini, a través del lanzamiento exterior, provocó el enfado de Álvaro Senovilla con dos goles libre de marca. Pudieron ser tres si el balón no se hubiese estrellado en la madera.

El técnico navero pidió más intensidad defensiva ante el ataque con siete del Blendio Sinfín, y sus chicos respondieron. Prokop, con un gran robo de balón y un nuevo gol a puerta vacía, enchufó nuevamente al Nava, que encontró también el acierto en sus lanzamientos desde fuera. El lateral eslovaco, con un nuevo tanto desde su campo, alargó la máxima diferencia a los siete goles (23-16).

Pero la gran intensidad defensiva de los naveros se cobró la exclusión de Mario Nevado. Ahí volvió a emerger la figura de Patotski que, con un nuevo paradón ante un lanzamiento de Alexander Tioumentsev, mantuvo a los cántabros a raya con estos siete de ventaja.

Recuperando al jugador excluido, Prokop y Moyano siguieron liderando una gran defensa que funcionó a la perfección. El lateral eslovaco se cobró un penalti y exclusión que transformó Dani Pérez, impecable desde los siete metros, y el argentino, con otro lanzamiento desde su casa, puso en diez la máxima ventaja navera (28-18).

Con esta renta, el Viveros Herol Nava se relajó y Blendio Sinfín pudo cortar la hemorragia y volver a acercarse a ocho goles con dos consecutivos de Jacob Díaz. Álvaro Senovilla dio el relevo en la portería a Luis de Vega, quien mantuvo a raya al conjunto cántabro en un final sin mucha historia en el que el Nava pudo celebrar a lo grande este primer triunfo.