Fuentepelayo tiene 'Ángel'

La Feria del Ángel es la cita de maquinaria agrícola y ganadera más importante de Segovia. Fuentepelayo es, este fin de semana, el punto neurálgico de la atención de estos sectores, no solo dentro de la provincia, sino también en al comunidad autónoma. Esta cita suele ser la elegida cada año para presentar al público las principales novedades de la temporada en cuanto a maquinaria y servicios se refiere, por lo que son muchos los profesionales que se acercan hasta la localidad.

Para ellos también se abre un espacio de análisis y debate sobre las cuestiones de actualidad en sus ámbitos, de la mano de unas jornadas técnicas que este año se han ampliado y han puesto el foco en distintas cuestiones, como la nueva Política Agraria Común, mediante una charla sobre oportunidades y retos, y otra sobre el papel de la siembra directa en la nueva normativa de la PAC. Además, también se han tratado las ayudas para mejorar la productividad y la gestión de procesos dentro del sector agropecuario.

Lo variado de los temas y su interés, junto con la oferta de productos hacen que agricultores y ganaderos de toda la comarca sean fieles a este encuentro cada año. En él no se suelen realizar operaciones, tal y como aseguran los propios vendedores, pero sí numerosos contactos para posteriormente cursar visitas comerciales en las que los interesados pueden conocer más en profundidad aquellos productos en los que se fijaron durante la exposición.

En esta ocasión no faltan las mejores máquinas del mercado y las novedades en tractores, cosechadoras o abonadoras. El visitante también se encuentra con lo último en accesorios como arados y otros elementos para mejorar el confort en la cabina, la visibilidad, el rendimiento, la protección, el almacenamiento o soluciones de enganche. Son algunas de las múltiples posibilidades que se ofrecen a lo largo y ancho de los 12.000 metros cuadrados de espacio exterior que ocupan los grandes tractores y la maquinaria agrícola y ganadera, lo que consigue cambiar la fisonomía de Fuentepelayo, especialmente de la calle El Ferial y sus aledañas, que se convierten en un gran expositor al aire libre.

En total, El Ángel se expande por 20.000 metros cuadrados, de los que 8.000 se reservan a instalaciones interiores, en distintos pabellones, y una pequeña parte a un mercadillo que se ubica en el exterior que también atrae a muchos visitantes cada año.

Pero no solo los sectores agrícolas y ganaderos son el atractivo de esta feria. Su carácter multisectorial logra atraer hasta Fuentepelayo actividades comerciales de diversa índole, pudiendo ver y adquirir los mejores alimentos, artículos de artesanía, textil, decoración, mobiliario, complementos, moda y distintos productos industriales, entre otros.

De la mano de esta amplia variedad de sectores representados en la muestra, llega un perfil de público muy variado, que ya no se limita a los agricultores y ganaderos interesados en conocer lo último en sus respectivos campos, sino que se amplía a todo tipo de visitantes, hombres, mujeres, jóvenes, adultos, jubilados y niños, que se pasan por Fuentepelayo para disfrutar de una jornada agradable y de las diversas propuestas que ofrece la cita.

Tampoco falta el perfil familiar y grupos completos que acuden a la feria a disfrutar de unas horas o de toda la jornada, lo que les permite también saborear la gastronomía local o probar los diferentes productos que se ofrecen en La Panera, un pabellón dedicado íntegramente a los expositores del sector de la alimentación, que ofrece una gran variedad de viandas dulces y saladas.

Además existen dos pabellones más, dedicados uno a productos industriales y otro a la artesanía, al campo textil y con un rincón también dedicado a la alimentación. A toda esta oferta hay que sumar un mercadillo, que se sitúa en unas de las calles cercanas al recinto ferial y que también es un aliciente para muchos visitantes.

Otro reclamo para asistir a Fuentepelayo este fin de semana es el caballo. De hecho, este animal protagoniza un acontecimiento con entidad propia. Se desarrolla de forma paralela a la iniciativa principal. Con ello se busca rememorar los orígenes de la muestra, que no son otros que los mercados de ganado que albergaba Fuentepelayo hace siglos.

Cada año existe un aliciente especial en forma de espectáculos ecuestres y exhibiciones, que reúnen a gran cantidad de público. Esta edición han sido los especialistas de la empresa Centauro los encargados de mostrar el buen hacer de los animales con danzas, piruetas y ejercicios de la mano de 'Magos de la equitación' y 'Al cielo a caballo'. Además, quienes se acerquen hasta la zona podrán disfrutar de la belleza de los caballos y ver cómo se les prepara para estos espectáculos.