Una sucesión de hechos y corazonadas anunciaban la lluvia de millones en el municipio segoviano de Ayllón con motivo del Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad. La regente de la administración madrileña La Bruja, en la calle de Colombia, que se encargó de enviar ... el número 48020, Raquel Nieto, sentía que «algo iba a tocar». Algo parecido sentía Rocío Feliux, una de las feligresas que se ha encargado de la venta de los décimos de la parroquia, que han sido agraciados con un cuarto premio este domingo. «Todo indicaba que iba a haber un buen final», se alegra.
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Fue hace meses cuando la parroquia de Santa María la Mayor de Ayllón puso en marcha la iniciativa de venta de décimos para recaudar fondos con el objetivo de destinarlos a sus labores de mantenimiento y restauración. Los participantes en el día a día de la iglesia acudieron a la lotera Raquel Nieto, natural de la localidad, para poner en marcha este procedimiento. «Elegimos el número 48020, que era libre, no estábamos abonados y lo jugábamos por primera vez; nos pareció bonito y ahora ya no lo vamos a olvidar», relató.
Raquel Nieto
Lotera
Su emoción era patente al mediodía de este domingo, cuando ya habían pasado unas horas desde la confirmación del premio. Del total de 193 series con las que contaba el número, su oficina había vendido alrededor de 160. Más de la mitad se habían repartido por Ayllón. Es decir, la parroquia había logrado animar a la compra de más de un millar de boletos -entre 1.030 y hasta 1.090, según las diferentes fuentes-. Esto significa que el grueso del premio, un total de 21 millones, había caído en el municipio de la provincia de Segovia.
Ayllón cuenta a día de hoy con alrededor de 1.100 habitantes, de los que se calcula que algo más de 300 contaban con al menos un décimo. «Más o menos el 30% se ha vendido a gente de aquí», comentó el párroco responsable de la iniciativa, Emmanuel Becerra. El resto fueron adquiridos por visitantes. «Ha estado muy repartido porque lo ha cogido mucha gente de fuera», confirmó Rocío Feliux.
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Hay turistas que, aprovechando su visita al pueblo, compraban un boleto para llevarse un recuerdo. Las ventas aumentaron exponencialmente durante el último puente festivo de la Constitución, cuando se organizaron itinerarios culturales para conocer el templo. Otros reservaban los décimos por pura superstición, que luego fue acertada. «Vino una mujer al pueblo que llamó específicamente para coger el número, que lo tenía apuntado en un libro, porque decía que iba a tocar: se llevó diez décimos», remarcó Feliux entre el amplio abanico de anédcotas.
«Muchos han venido en busca del 48020 en concreto», aseveró. Otros lo compraron en la máquina de lotería situada en el estanco de la Plaza Mayor, que vendió un total de seis décimos. Es un hecho que ha tenido un gran reflejo en las calles de Ayllón. «El de la lotería era un fin de semana que no era turístico, pero ha habido mucho ambiente de personas que han venido a celebrar el premio», subrayó la regidora, Rosalía Martín.
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Era fácil observar escenas de abrazos, felicitaciones y miradas cómplices de ilusión entre aquellos que, rezagados, habían alargado la hora del vermú. Uno de los clientes de un bar enseñaba uno de los décimos premiados y sonreía: «He comprado tres». A continuación, entregó un donativo de 50 euros a la parroquia.
Está previsto que este lunes se reúna una multitud para festejar la lluvia de millones en Ayllón, una de las mayores en la historia de la localidad. «Ha sido todo tan rápido que no nos ha dado tiempo a organizarnos», bromeó Feliux, una de las feligresas que, junto a su compañera Gloria, han sido las encargadas de llevar la alegría a gran parte de la comarca.
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«Es increíble, tengo una emoción que no se puede explicar con palabras. Estaba en la ducha cuando ha empezado a sonar el teléfono todo el rato y, cuando lo he cogido, me han dicho que mirase la televisión, que habíamos ganado un cuarto premio: no sabía ni lo que tenía que hacer en ese momento», recordó Feliux. También es un hito que pilló de sorpresa a Nieto, la lotera que atinó en la elección de número. «Estaba de viaje a Extremadura cuando me han avisado rápidamente y me he tenido que dar la vuelta», insistió. Hasta este domingo «no habíamos dado todavía ningún premio de Navidad».
En el pueblo recuerdan brevemente algunas de las historias más recientes de episodios de suerte durante el Sorteo Extraordinario. Fue en 2012 cuando la peña juvenil El Puntazo repartió 66 boletos del Gordo y obsequió a alrededor de doscientos vecinos del pueblo con más de ocho millones de euros en total. Uno de los integrantes de la agrupación atinó cuando trajo de la administración número 2 de Aranda de Duero el 42260. En 2002 se vivió otro feliz episodio, al conseguir un pellizco correspondiente al segundo premio de la Lotería de Navidad. «Somos más bien un pueblo afortunado», destacó Daniel Sanz, propietario del estanco en el que se han expedido seis décimos agraciados.
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