Fernando Llorente, contra el viento y la falta de espacios

Sin embargo, octubre no está siendo un buen mes para el centrocampista gimnástico, que empezó la temporada a un gran nivel con dos goles en la victoria frente al Villanovense. Pero desde su suplencia en Getafe, Llorente no ha estado cerca de su nivel. Fallón con el balón en sus pies y mal en la toma de decisiones, los azulgrana han notado el bajón del que debe ser su líder en el centro del campo.

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Frente al San Fernando, Fer Llorente volvió a evidenciar que no está en su mejor momento. Tampoco el duelo ante el equipo canario era el mejor para recuperar sensaciones. Comenzó un escalón por encima de Manu en el centro del campo, pero pronto tuvo que acercar su posición al capitán para no romper al equipo. Pero sus diferentes alturas en el centro del campo no provocaron cambios en su nivel. Como encargado de romper la línea primera línea de presión del San Fernando, Fer Llorente tuvo numerosos problemas para encontrar a los jugadores de ataque de la Gimnástica.

No se lo puso fácil el San Fernando. Con una línea de cinco en defensa y una de cuatro en el centro del campo, los espacios entre líneas para que Fer Llorente pudiera marcar las diferencias eran casi inexistentes. Además, el viento incrementó aún más las dudas de un equipo que lleva semanas impreciso en el centro del campo.

Lo que no le falta nunca a Fernando Llorente es su personalidad y su liderazgo sobre el campo. Consciente también de que no está tan preciso como a él mismo le gustaría, jugó más en corto que de costumbre y no arriesgó tanto con pases capaces de romper líneas. Tampoco distribuyó de banda a banda con la fluidez a la que acostumbra, con algún que otro intento de pases en profundidad que acabaron en las filas del San Fernando.

También lo intentó con disparos desde la frontal del área, otra de las armas del centrocampista segoviano, el segundo máximo goleador de los azulgrana en lo que va de temporada. Lo intentó en dos ocasiones, aunque tan solo estuvo cerca del gol en la segunda parte. Encargado de ejecutar la mayor parte de las jugadas de estrategia de la Gimnástica, en esta ocasión tampoco brilló en las acciones a balón parado.