El ensanche del puente de la carretera vieja de Arévalo solucionará un punto negro

La intervención persigue mejorar la seguridad vial en este tramo de concentración de accidentes de la CL-607, que presenta una sección transversal insuficiente, dado que existe un estrechamiento de la calzada que en el puente queda reducida a un solo carril de cinco metros de ancho para el tránsito de vehículos. Esta vía, que pertenece a la red básica de carreteras de la Junta de Castilla y León, bordea la ciudad de Segovia y tiene una Intensidad Media de Vehículos (IMD) de 4.374 vehículos al día.

El proyecto a llevar a cabo ejecutará en el puente una calzada de dos carriles de 3,50 metros cada uno, además de arcenes y aceras a ambos lados. También se incluye en la obra la mejora del drenaje con cunetas de desmonte, además de la construcción de pasos salva cunetas, así como bordillos y bajantes prefabricadas en terraplén. Las obras se completarán con la protección de escolleras en ambas márgenes de la carretera y la señalización horizontal y vertical, entre otras actuaciones.

Los trabajos a acometer cuando se adjudique la ejecución del proyecto incluyen, entre otros, la demolición y fresado del pavimento existente y la construcción de una nueva estructura que se adaptará a la geometría del puente, de manera que mediante arcos de hormigón armado se ajuste la forma a los arcos de piedra del puente actual y con un acabado de piedra similar al existente.

También se ha previsto la protección frente a avenidas extraordinarias del río Eresma en el tramo de actuación en cuanto a la erosión del cauce, con escolleras que cubran la zona de estribos y pilas.

El trámite de licitación llevará varios meses, de modo que las obras y la afectación del tráfico serán anunciadas con antelación.