La eliminación de las cimentaciones centra los trabajos en la parcela del centro de salud de la villa

Al menos esas son las previsiones tanto del Ayuntamiento como del gobierno regional, quien, en el anteproyecto de ley de los presupuestos de la Comunidad para el próximo ejercicio, incluyó una partida de algo más de medio millón de euros para el inicio de la edificación, cuestión que además aparecía como inversión prioritaria.

Las obras, que comenzaron hace unas semanas, tienen como finalidad retirar todas las edificaciones existentes en el lugar y que quedaron tras derruir el antiguo matadero, lo que se realizó para la cesión de la parcela. Por ello, tras eliminar los restos de construcciones, las cimentaciones y escombros existentes en el lugar, también habrá que derribar una pequeña nave situada junto al solar.

Para ello, en primer lugar, habrá que realizar la retirada de la cubierta de fibrocemento, lo que ejecutará una empresa especializada, para después pasar al derribo de la nave, que se llevará a cabo por empuje para los muros, y con martillo neumático para las soleras, tal y como se está realizando en la actualidad con la cimentación existente de la anterior construcción.

Por razones de seguridad, los muros existentes exteriores a la parcela resultante, que contienen las aceras de la calle Ciclismo por sus márgenes norte y oeste, no se incluyen en la obra, sino que su demolición se deberá acometer en el marco de las obras de urbanización de la zona, que, según está previsto, se deberán realizar de forma simultánea con las de edificación del futuro centro de salud.

Finalmente, en el proyecto se añade a la intervención la limpieza, tala y retirada de arbustos en toda la superficie de la parcela, asegurando de esta forma la limpieza y salubridad de la misma. Estos trabajos se están desarrollando de forma simultánea a la retirada de las cimentaciones y escombros existentes en la parcela.

Con la ejecución de estos trabajos, el lugar previsto para la construcción de la infraestructura sanitaria quedaría limpio y a disposición de la Junta de Castilla y León, que podrá ya llevar a cabo la licitación del proyecto y, previsiblemente, el inicio de las obras, cuestión muy esperada por los vecinos de Cuéllar y su comarca desde hace años.

Aunque aún quedan varios pasos, hace ya tres años se aprobó el plan funcional del centro, que se estructuraba en una superficie de 2.651 metros cuadrados útiles, divididos en diferentes áreas, como zona de acceso y vestíbulo principal para ubicar cinco puestos para administración en la zona de atención al paciente y el archivo de historias clínicas; zona de consultas de atención primaria, para doce consultas de medicina de familia y comunitaria, nueve de enfermería, una para ecografías, otra para retinografías, una para cirugía menor, una de telemedicina, dos de pediatría, dos de enfermería pediátrica y dos polivalentes, una sala de lactancia, dos salas para técnicas y curas y una de procedimientos técnicos, así como un despacho de trabajador social.

También incluía zona de extracciones y radiodiagnóstico, zona de apoyo administrativo, zona de servicios con almacenes, aseos, vestuarios y garaje para el personal, unidad de profilaxis obstétrica, unidad de rehabilitación, espacios para salud bucodental, salud pública, el Punto de Atención Continuada (PAC), Unidad de soporte vital básico y la base de emergencias sanitarias.