«La cultura no es patrimonio exclusivo del Ayuntamiento de Segovia», rebate el delegado de la Junta

Mazarías anticipa que, por parte de la Consejería de Cultura, «la celebración de los festivales no peligra». Lo que pretende le departamento que dirige Javier Ortega a través de esta modificación del modelo es que, «además de la subvención, se pueda abundar en otras fórmulas de colaboración, y eso lo saben las direcciones de los festivales», explica en respuesta a las duras críticas que unas horas antes ha realizado la alcaldesa de Segovia. Clara Luquero ha recriminado a la Junta el seguimiento de una estrategia que persigue «diluir la cultura de la ciudad», en referencia a los recortes presupuestarios del Ejecutivo regional a Titirimundi y Hay Festival.

También acusó a la Administración que preside Alfonso Fernández Mañueco de «querer hacernos sombra» con un nuevo evento, similar al encuentro literario que se desarrolla en Segovia desde hace dieciséis años, que la Junta sufraga con más de 300.000 euros. «Sufrimos una doble discriminación», lamentó la regidora, quien calificó de «abandono» y «ninguneo» el comportamiento del Gobierno regional para con los referentes culturales de la capital segoviana.

El delegado territorial niega rotundamente esa dejación, al mismo tiempo que revela que la Fundación Siglo pidió a las organizaciones de los festivales que «concretasen otras fórmulas de colaboración», además de las ayudas directas económicas. Mientras las direcciones del Hay y del 3D Wire han respondido y han esbozado sus propuestas alternativas, que en el caso del primer evento pasan por la celebración de algunos actos en otros lugares de la comunidad de castellana y leonesa, el responsable del Ejecutivo regional en la provincia apunta que Titirimundi no ha contestado ni ha presentado iniciativa alguna.

Mazarías defiende el cambio de modelo hacia una concurrencia pública para que se puedan beneficiar más eventos y subraya la contribución de la Junta mediante estas ayudas a la realización de acontecimientos en el medio rural que con el anterior sistema de subvenciones se habrían quedado fuera del reparto ya que la consignación se hacía sin convocatoria pública, expone el delegado de la Junta en Segovia.

Con la modificación introducida por la Consejería de Cultura, José Mazarías precisa que este año se han habilitado partidas para 72 festivales de los 152 que solicitaron el respaldo. De los beneficiarios, el 55% tiene su sede en las capitales y el resto se desarrollan en enclaves del medio rural, por lo que «se apuesta por la cultura y al actividad artística como motores de crecimiento» en esos entornos.

Admite que el montante a distribuir con el que partió la convocatoria «siempre resulta poco». Este año, la Consejería de Cultura ha dispuesto de una partida conjunta de 550.000 euros, «insuficiente», como la tachó la alcaldesa de Segovia. El delegado territorial de la Junta replica que «cuando finalice la crisis y sus condicionantes económicos, se puede aumentar la cuantía».

En su defensa del nuevo modelo, José Mazarías recuerda que en la anterior convocatoria de ayudas regionales, las subvenciones solo alcanzaron a 25 eventos, y en 2019 a 29, por lo que se han multiplicado las propuestas a las que el Gobierno de Castilla y León va a prestar su respaldo en forma de ayuda económica contante y sonante. Y pone el ejemplo de la Fundación Juan de Borbón de Segovia, que para este ejercicio va a contar con casi 14.000 euros de la Junta para el desarrollo de su actividad, cuando en ediciones anteriores había carecido de esta colaboración.

«La Consejería de Cultura colabora en coordinación constante con las direcciones de los acontecimientos, y ahora también busca nuevas fórmulas para ampliar y abrir espacios a otros festivales en distintos puntos de la comunidad», apuntala el delegado de la Junta en su exposición.

La alcaldesa de Segovia había manifestado este lunes su «indignación» por la política cultural de la Junta, que «nos fuerza a celebrar actos en otros territorios para no identificar el festival con la ciudad». En cuanto al foro literario que inaugura el otoño segoviano, Clara Luquero afirmó que ya existía «preocupación por la competencia de crear un evento similar al Hay con el criterio de dispersarlo por todas las capitales de provincia». Asimismo, incidió en que el acontecimiento titiritero «es de Segovia, que forma parte de Castilla y León, pero ante todo de Segovia».

Frente a estas palabras, José Mazarías, insiste en que la colaboración autonómica es «continua y constante». «La cultura no es patrimonio exclusivo del Ayuntamiento», replica el delegado territorial, que defiende las apuestas de la Junta en la ciudad: El Museo de Segovia, el Zuloaga, Palacio Quintanar y la Biblioteca Pública. Entre todos, el año pasado de pandemia y restricciones, la Junta gastó más de 720.000 euros, arguye el representante regional, quien cita también las colaboraciones con tras entidades e instituciones, como el Museo Esteban Vicente, al que aportó 90.000 euros.

«El Ayuntamiento no es el único agente cultural, la Junta hace muchas cosas y colabora con muchas actividades», subraya el delegado territorial.