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Plaza del Cristo del Mercado. Antonio Tanarro

El Cristo del Mercado, un barrio que «necesita mejorar»

El mal estado de algunas calles y la dejadez en la limpieza del talud de El Poleo son algunos de los defectos que impiden al barrio ser una buena «tarjeta de presentación» para la ciudad

Laura Lopez

Segovia

Lunes, 10 de mayo 2021, 20:48

El del Cristo del Mercado es de los barrios más emblemáticos de Segovia. Desde su neurálgica plaza presidida por la ermita del Cristo del Mercado relata Juan Bautista Mullor la situación del barrio, que ha perdido según calculan unas 30 personas por la pandemia del covid. La Asociación de Vecinos Santo Cristo del Mercado, fundada en 1986, cuenta con 290 socios. Sí existe, según su presidente, un «sentimiento de barrio» en esta zona de la ciudad, que achacan a la tradición centenaria de las fiestas.

«Ha sido un mazazo enorme para el movimiento vecinal en general, porque no podemos hacer nuestras actividades de costumbre, está prohibido que realicemos actividades en la sede también porque no podía haber más de cuatro personas, luego seis… hasta que esto no se aclare y esté vacunado el 70% de la población no se va a abrir la mano, y es que sería una irresponsabilidad por nuestra parte retomar las actividades», comenta Mullor.

El presidente de la asociación de vecinos define a las personas del barrio como «de clase media« y con un equilibrio «entre personas jóvenes y de edad», con muchos profesionales por cuenta ajena que ostentan negocios de tipo familiar y funcionarios: «También muchas personas que trabajan en Madrid, por la buena comunicación del barrio para la entrada y salida a la capital», explica.

Aceras y carreteras

Algunas «tercermundistas»

«Este barrio no progresa adecuadamente». Y añade algo más: «En algunas cosas no es solo que no progresa, sino que regresa a anteriores etapas». En su opinión, «no hay una atención necesaria» para, por ejemplo, arreglar ciertos tramos del barrio. Las calle Arroyos y Agapito Marazuela parecen «calles tercermundistas», en palabras del presidente de los vecinos: «Tienen baches enormes y unas aceras inclinadas que por ahí es un peligro andar porque puedes tener un problema de tobillo», señala Mullor. En el caso de Agapito Marazuela, el Ayuntamiento pronto acometerá las obras para remodelar la vía, según han sabido en la asociación.

Estado de unas de las aceras del Cristo del Mercado. Antonio Tanarro

«Por no hablar de las aceras de la avenida de la Constitución, que lleva más de cinco años esperando que se hagan unas aceras, como se previó cuando se alquitranó toda la calzada y dijeron que harían las aceras (las obras han empezado este lunes), e hicieron un tramo, pero faltaba un trozo y ahora se vuelve a oír decir que van a arreglar esa parte, que es desde la casa de los militares hasta aquí arriba», señala el representante de los vecinos.

La imagen

El cableado exterior

Otro aspecto que preocupa a los vecinos del barrio del Cristo del Mercado es el cableado aéreo que desde hace unos cinco o seis años se instaló en algunas calles como Arroyos, Cristo del Mercado y Agapito Marazuela: «Cruzan de una parte de la calle a otra, eso se ve en países subdesarrollados», critica Mullor. «Ahora que van a atender, entre comillas, la calle Agapito Marazuela, seguro que no se les ocurre hacer un canalillo para ocultar los cables, y eso que van a levantar todo el suelo», opina el presidente de vecinos. «No es aceptable que en una Ciudad Patrimonio de la Humanidad exista esto», lamenta.

Cableado exterior en una calle del barrio. Antonio Tanarro

Suciedad

Un talud «lleno de porquería»

Según relata Mullor, en la última reunión que mantuvieron con la alcaldesa de Segovia, en octubre de 2019, también la pusieron al corriente de otra de las principales quejas de esta zona de la ciudad: el talud de la calle El Poleo. En esta zona, según asegura este vecino «los barrenderos no pasan nunca». «Allí hay unos edificios, desde el número diez hasta el número veinte de la avenida Obispo Quesada, que tienen viviendas que dan a la calle y otras que dan a la parte de atrás. Bueno, pues las que dan a la parte de atrás tienen esas vistas tan atractivas de un talud lleno de porquería lleno, lleno, lleno porque nadie lo quita ni nadie lo limpia», critica el portavoz de los vecinos.

Talud de la calle Poleo. Antonio Tanarro

La asociación tiene pensado recoger firmas de los portales afectados para materializar la queja. «Además son tierras movedizas, que cuando llueve cada vez va soltando más tierra y a los pisos de la primera planta casi les llega ya a los balcones, entonces los que viven allí los hombres están seriamente cabreados, como se suele decir, porque ven que no se pone solución… nosotros lo hemos dicho y vamos a seguir insistiendo hasta sensibilizar al Ayuntamiento de que esos ciudadanos, esos vecinos de este barrio que pagan sus impuestos, quieren y exigen que se limpien sus zonas», comenta Mullor.

Protección

Un parterre junto a la ermita

La ermita del Cristo del Mercado, declarada como Bien de Interés Cultural, no está debidamente protegida, en opinión de los vecinos que pasan por delante de ella prácticamente todos los días. En primer lugar, por el aparcamiento de los coches en sus inmediaciones. Aunque el Ayuntamiento pintó unas líneas en zig-zag para que no se aparcara en la acera que está a los pies del monumento, «en la práctica no se respeta y está siempre lleno de coches». Por otro lado, detrás del edificio existe un parterre que «se atiende a medias»: «La gente, como somos así, atravesamos pisando el parterre, así que pedimos que se ponga alrededor del jardín una especie de celosía metálica para que la gente no pueda atravesarlo», comenta Mullor.

Entrada a la ciudad

Una mala primera imagen

En el barrio se enorgullecen de tener la entrada más importante de la ciudad, por la que se accede desde Madrid. Sin embargo, creen que la zona de la carretera de San Rafael constituye «una pésima presentación» por las casas derruidas que allí se encuentran. «Yo siempre he oído que la tarjeta de visita de la ciudad es su entrada», señala Mullor, quien apunta a «una falta de voluntad por parte de la corporación de querer hace más atractiva Segovia»: «Segovia no tiene que ser atractiva solo por los monumentos, que también, sino por estar cuidada y atendida, por eso nos quejamos de esta situación», opina el presidente de la asociación de vecinos.

Algunos de los edficios situados a la entrada del barrio. Antonio Tanarro

Otra de las incomodidades que Mullor asegura que han trasmitido ya al Ayuntamiento es la existencia de un badén en la plaza de la ermita que hace que los camiones que pasan por hagan un estruendo muy molesto para los vecinos que por allí viven, como es su caso: «Imagina a las seis de la mañana, cuando viene una camioneta… todos los vecinos nos despertamos, es el mejor despertador», bromea.

Aspectos positivos

Buenas comunicaciones

Como aspectos positivos, el presidente de vecinos destaca la buena comunicación que tiene el barrio con el resto de la ciudad, con hasta tres zonas para coger el autobús, y unos horarios que fueron recientemente mejorados por parte del Ayuntamiento. También la estación del tren de alta velocidad, que aunque está «en el quinto pino», según apunta Mullor, con la línea de autobús habilitada puede ser una buena opción para los desplazamientos a Madrid. También destacan los vecinos los buenos servicios que les hace sentirse «bien atendidos», como el supermercado. Sin embargo, lamentan la gestión de la estación de tren antigua, que en opinión de Mullor podría ser reactivada para el transporte de mercancías.

Juan Bautista Mullor, en la plaza del barrio. Antonio Tanarro

«Las calles y las aceras no están como se merecen los vecinos, que para eso pagamos impuestos»

-¿Por qué se hizo presidenta de la Asociación de Vecinos?

-Yo he estado trabajando toda mi vida en la Caja de Ahorros y me prejubilé en el año 99. Sabía que existían asociaciones de vecinos, pero jamás se me había ocurrido participar en ellas. Un buen día, al que yo sustituí, que ya ha fallecido, Julio Félix Navajo, me estaba esperando con otro miembro de la junta directiva aquí en esta plaza, hasta que aparecí, porque yo no había quedado con ellos, y entonces me dijeron 'Oye, mira, te estábamos esperando para decirte que Julio Félix ya no vive en el barrio, queremos cambiar la asociación, la directiva y nos hemos acordado de ti…' y así me pillaron.

-¿Cómo definiría a los vecinos?

-Los vecinos del barrio, como del resto de la ciudad, tienen poco atractivo hacia el movimiento vecinal, pero no porque lo piensen para hacerte de menos, sino porque son muy cómodos y mientras haya quien resuelva esas papeletas ellos están ahí tranquilamente… lo suyo es que hubiera gente que se sintiera atraído por este servicio que está creado por el pueblo… porque esto no es de los políticos, el movimiento vecinal lo creó el pueblo.

-¿Qué debilidades cree que tiene el barrio?

-Para mí, la mayor debilidad es que las calles y las aceras no están correctamente como se merecen los ciudadanos, que para eso pagamos nuestros impuestos.

-¿Cuáles son sus mayores fortalezas?

-La fortaleza de este barrio es su tradición, el que desde hace varios siglos la colocación del mayor se ha venido haciendo hasta que la pandemia nos lo ha prohibido. Entonces, yo espero que cuando pase esto se vuelva a retomar.

-¿Cómo valora la gestión del Ayuntamiento en lo que su vecindario respecta?

-Diría que insuficiente.

-¿La irrupción de la pandemia ha cambiado al barrio? ¿Sus vecinos han aprendido alguna lección?

-Los vecinos, como personas bastante responsables en su gran mayoría, como cualquiera, tratan de preservar su salud, entonces las autoridades sanitarias nos han dicho que prescindiéramos de las grandes aglomeraciones, de las reuniones, etcétera etcétera… pues realmente es una medida de precaución que los vecinos han tomado y que yo aplaudo para evitar que haya más contagios.

-¿Cómo le gustaría que fuera el futuro de su barrio?

-El futuro del barrio pasa primero porque se atiendan mejor las calles, las aceras y se elimine el cableado y segundo, porque la entrada de Segovia más importante, que es esta, se adecúe a una ciudad que es Patrimonio de la Humanidad.

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