Los conciertos de pago de las fiestas de Segovia, al CIDE

Finalmente, el concierto 'Locos por la música' con Seguridad Social, Revólver, Los Rebeldes y Modestia Aparte del 21 de junio, así como el concierto de Cano, Ingratax y RDFER del 26 de junio, se celebrarán en un espacio situado junto al edificio de la calle Campos de Castilla con capacidad para 5.500 espectadores. La explanada, delimitada en dos lados por vallas y por un tercer lado por el propio edificio, permitirá la celebración de los dos conciertos sin la instalación de ningún tipo de graderío. «El público no tendrá acceso a las fachadas», resaltó Mazarías ante los posibles riesgos de daños en el edificio.

El regidor defendió la alternativa escogida por el gobierno municipal. Aunque reconoció que la plaza de toros era su opción preferente para este año, indicó que la plaza situada junto al edificio CIDE era desde hace meses el plan B del Ayuntamiento de Segovia para celebrar este tipo de actividades. «Es accesible, grande y cómodo», comentó. En este sentido, aludió al diseño del CAT realizado hace casi dos decenios por el arquitecto David Chipperfield, que incluía en el espacio libre entre los edificios previstos (el CIDE es solo uno de los que se contemplaba) la posibilidad de celebrar «eventos cívicos a gran escala».

«En ese espacio caben miles de personas. Se han realizado los informes y las mediciones para que todo funcione», expuso Mazarías sobre la explanada del CIDE, que este mismo jueves será escenario de la entrega de los premios de la Federación Empresarial Segoviana.

Sobre la forma de llegar hasta el recinto, el alcalde indicó que el Ayuntamiento de Segovia ha planificado un servicio especial de autobuses urbanos para poder llegar y salir de la zona. Además, también se permitirá el aparcamiento de vehículos particulares en las parcelas próximas al lugar de los conciertos. Por último, señaló una ruta «acerada e iluminada» para que los segovianos que lo deseen puedan llegar hasta la explanada caminando.

Mazarías defendió la nueva ubicación de los conciertos de pago frente a otras utilizadas por anteriores gobiernos municipales, como las actuaciones de la orquesta Panorama o de Camela en la plaza Tirso de Molina del barrio de Nueva Segovia. «Era un sitio entre bloques y no dejaba de ser un recinto urbano. A muchos vecinos les gustaba contemplar el concierto desde los balcones pero otros protestaban. Por no hablar de otras situaciones, como las condiciones de seguridad, que en algunos momentos eran comprometidas. Tenemos que recurrir a espacios que tienen mejores condiciones», declaró.

El pasado 16 de mayo, el alcalde de la ciudad anunció que el gobierno municipal había firmado un convenio con la propiedad de la plaza de toros de Segovia para celebrar en el interior del coso los dos conciertos de pago de las Ferias y Fiestas de San Juan y San Pedro. Según dijo entonces, el precio que el Ayuntamiento abonaría por el uso de la instalación durante los dos días era de 11.000 euros.

Sin embargo, menos de un mes después de aquel anuncio el regidor ha señalado que no se ha alcanzado un acuerdo con los propietarios, con quienes el Consistorio lleva negociando desde noviembre. «La propiedad ha decidido que no se celebren allí los conciertos y no ha sido un problema económico», dijo.

Aunque en una fase inicial de las negociaciones «parecía que se iba a alcanzar el acuerdo sin problema», las conversaciones se fueron complicando ante el deseo del propietario de involucrar a la administración municipal en el mantenimiento de la plaza y en la celebración de festejos taurinos. Unas condiciones rechazadas para este año por el gobierno municipal, aunque Mazarías sí dejó abierta la puerta a acceder a las peticiones en los próximos años.

«Empezaron a aparecer las pegas», relató el alcalde. El precio por concierto pasó de 5.500 a 8.000 euros y se exigieron medidas como la retirada de los escenarios la misma noche de los conciertos o rastrillar la arena de la plaza de toros también horas después de la celebración de las actuaciones musicales. «Lo llegamos a aceptar. Nos comprometimos a ello», añadió el regidor. Pero la propiedad «puso fin a las conversaciones y negó definitivamente el uso de la plaza de toros para los dos conciertos».