Los centros especiales emplean a 258 personas con discapacidad

La Junta de Castilla y León subvenciona la empleabilidad de las personas con discapacidad a través de varias líneas de ayer. La principal subvenciona el 50% de los costes salariales de estos empleados. La provincia divide estos centros entre los que tienen ánimo de lucro y los que no. Para los primeros, las ayudas han superado este año los 1,4 millones de euros; para los segundos, unos 65.000 euros.

Hay una segunda línea que subvenciona un 25% adicional para los trabajadores con especiales dificultades de empleabilidad por tener una discapacidad mayor. Es el caso de las personas con parálisis cerebral con este 33% o personas con discapacidad física o sensorial que tienen reconocido al menos un 65%. La Gerencia de Servicios Sociales es la encargada de acreditarlo. Para estos casos, la Administración paga el 75% de los costes salariales. Los centros con ánimo de lucro han recibido 93.000 euros a lo largo de este año a través de esta línea; el resto ha recibido unos 2.000 euros. Entre las 18 entidades del listado de centros especiales de empleo está Apadefim 2000 (con 25 empleados con algún tipo de discapacidad), los Jardineros de la Unidad Especial (13), Radio Taxi (5), DrinSeguridad (20), Digital Audio (5), Ilunión Lavanderías (110), Asprona (3), Paladi Arte (4), Inseradecco (4), Amanecer Segovia (2), Epservi360 (6), Ilunión Outsourcing (1), la Plataforma Logística Integral, en Valverde del Majano (18), Multiser Málaga (2), Genser (1), Grupo Sifu (8) y FCC (1). En total, 258, un dato que fluctúa cada mes, puesto que hay bajas y altas de manera frecuente.

Cada centro debe mandar al principio de cada año la documentación para revalidar que cumple con los requisitos y pueda así solicitar las líneas de subvención. Para ello, al menos el 70% de la plantilla debe tener reconocido algún tipo de discapacidad de al menos el 33%. La normativa otorga especial protección a personas con mayores dificultades de empleabilidad

Entre las categorías que desempeñan, están las de telefonista, administrativo, oficial administrativo, técnico auxiliar, operadores auxiliares, operario de planta, conducto, ayudante de conductor, encargado de turno y oficiales de 1ª y de 2ª de mantenimiento. Por ejemplo, revisan las instalaciones contra incendios en empresas, atienden las llamadas de taxi, revisan el estado de las alarmas, realizan cuidados en residencias o se encargan de todo tipo de manufacturación. La franja de edad en la que hay contratadas más personas con discapacidad es la de los trabajadores a partir de 45 años: hay más hombres que mujeres.

Otra vía más indirecta de subvenciones que incentiva el empleo de personas con discapacidad es a través de las inversiones, siempre que generan empleo. Por ejemplo, una empresa que invierte en una máquina concreta para su producción y contrata a dos personas con una discapacidad reconocida para operarla. En este caso, la contratación se subvenciona con 9.000 o 12.000 euros, en función de la discapacidad acreditada del trabajador. El tope de la ayuda es el 75% de la inversión realizada en esa maquinaria. Las subvenciones de este tipo han superado los 60.000 euros en Segovia a lo largo de este año.

La directora de la Oficina Territorial de Trabajo de la Junta en Segovia, Raquel Alonso, subraya que el principal obstáculo que afronta un trabajador para formar parte del sistema es su propia limitación. «Si una persona tiene una parálisis de las piernas, evidentemente no va a poder hacer trabajos que conlleven utilizarlas. La discapacidad es la que les va a limitar, dependiendo del trabajo. Lo que hace la Administración es dar una ayudita a las empresas para que se den cuenta de esa vulnerabilidad social que existe y dar una oportunidad a estas personas».

El paso de los años ha consolidado en Segovia un número cercano a la veintena de centros especiales de empleo. Alonso identifica una tendencia cada vez más integradora entre los empleadores: hay más empatía. «Ahora cada vez se están rompiendo más barreras. Con independencia de las ayudas de la Administración, la gente está cada vez más concienciada socialmente. Si se puede dar una oportunidad, se da».