La Catedral de Segovia pone orden en su 'cajón de sastre'

García Rivilla explicó que 'El Pantocrator' ya está expuesto en el acceso a la Capilla del Santísimo Sacramento, enfrente de un Calvario que también procede de la antigua Catedral de Segovia. La restauradora Paloma Sánchez resaltó que tiene dos policromías diferentes, una fechada entre los siglos XIII y XIV, en la cara, mientras que los paños azules y rojos son del siglo XVI. Además, tiene una inscripción original del XIV que dice que esta obra fue «mandada hacer por el cura Fernán Muñoz, beneficiario de esta iglesia».

Paloma Sánchez, junto al también restaurador de la Catedral Graziano Panziari, encontró «muchos levantamientos de policromía y muchas pérdidas de preparación». La más desgastada era la policromía del siglo XVI. Panziari explicó que retiraron toda la resina acrílica de las distintas intervenciones para poder asentar y consolidar el color para después, «con tintas neutras», poder respetar ambas policromías sin dar «protagonismo ni a una ni a otra» al no poder llegar a la original.

En cuanto al 'Retablo', procedente de la ermita del pueblo segoviano de Frumales, se cree que llegó a la Catedral en 1960 por 50.000 de las antiguas pesetas y se le entregó a García Ayuso, restaurador del Alcázar, según figura en una inscripción. Los actuales restauradores se la encontraron con una pérdida del banco de apoyo y de la tabla central, que «la debieron cortar en un momento dado», sostuvo Paloma Sánchez, «No sabemos que representaría», pero parece que, por los restos de los laterales, «podría ser una Virgen entronizada», señaló.

Panziari destacó que es un retablo «muy particular» porque está hecho en una sola tabla, una sola pieza, cuando normalmente se hace una armazonería, y luego «están las tablas que componen el resto». En esta pieza se ha vuelto a poner los travesaños que estaban recortados y la tabla central al mismo nivel que la policromía original, así como reponer «la moldura de la prevela», siendo «lo más respetuoso posible».

El lienzo de la 'Caridad romana' es del siglo XVII y los restauradores se centraron en solucionar los problemas que presentaba en el soporte para «evitar deformaciones con nuevas bandas de tensión en el vestidor». Este cuadro se puede ver en las escaleras de acceso a la sala donde se expone la colección de tapices de 'Los Planetas'.

Las tres obras, cuyo proceso de restauración ha durado cinco meses, se encontraban en «el cajón desastre, con todos los respetos», dijo García Rivilla, que era la capilla de Santa Catalina, en cuya recuperación se está trabajando, con una inversión de 145.000 euros y centrada en el saneamiento de las paredes.

El deán avanzó que, siguiendo el consejo de los expertos, no se va a seguir trabajando en la sala hasta dentro de un mes para que pueda cuajar a la perfección la intervención realizada para acabar con las humedades. El objetivo del Cabildo de la Catedral es convertir la capilla de Santa Catalina en un nuevo espacio expositivo con obras de arte y de orfebrería.

En la parte central de capilla se encuentra el sepulcro, rodeado de una reja que también está siendo restaurada para recuperar su color azulado original, del infante Pedro de Trastámara, que cuenta con policromía original. García Rivilla recordó que este monumento funerario fue trasladado desde la antigua Catedral de Segovia, que estaba junto al Alcázar.

Ángel García Rivilla también explicó que ya tiene redactado el plan de restauraciones para el 2020, que tiene que ser aprobado por el Cabildo Catedralicio, aunque avanzó su intención de que se pueda llegar a la Capilla de San Geroteo –fundada y costeada por el, según la tradición, primer obispo de Segovia, Juan José Martínez Escalzo, en 1773– para su recuperación. El deán resaltó que las primeras actuaciones en la Catedral se acometieron hace tres décadas en la zona de la Girola, a la que volverá cuando finalice «la intervención en San Geroteo».