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Es una escena que se ha repetido de forma recurrente en las últimas semanas. Un cliente llama a un restaurante y lanza una propuesta de fecha para concertar una reserva. El día elegido coincide con el festivo por Navidad, Año Nuevo o Reyes, por lo ... que la respuesta que se otorga al interesado suele ser la misma: «Estamos al completo». El periodo navideño ha abarrotado los establecimientos hosteleros tanto de la ciudad de Segovia como de numerosos municipios de la provincia. Los comensales cada vez eligen con más antelación los locales para organizar banquetes con compañeros de trabajo, amigos o familiares. Hay citas gastronómicas que se han concertado hace un año.
«Es muy difícil encontrar sitio», asegura el gerente de la Asociación de Empresarios de Alojamiento, Hostelería y Turismo de Segovia (Hotuse-Aihs), Javier García Crespo. «Multitud de restaurantes están llenos», subraya. Los pocos huecos que quedaban libres en los comedores se reservaron con hasta un mes de antelación para la celebración de las jornadas más especiales de la época navideña. El gremio hostelero confirma una mayor tendencia de los residentes y visitantes a salir a comer en las fechas típicas. Es un hábito extendido en la capital segoviana, que recibe también a los turistas que tienen previsto viajar en Navidad a algún punto del mapa provincial desde el extranjero.
Los restaurantes dan el pistoletazo de salida a una época frenética de demanda y afluencia. «Se nota que la gente quiere celebrar y las expectativas son muy positivas», señala la presidenta de Festur, Rocío Ruiz. La temporada comienza con las cenas de empresa. Muchas de ellas ya han tenido lugar a mediados de noviembre y otras se retrasan hasta enero. Los trabajadores hacen la reserva con «mucho tiempo» e incluso, al repetir de forma habitual el mismo sitio, «tienen claro dónde quieren ir y llaman con antelación», relata García Crespo.
Los grupos de empleados apuestan en mayor medida por la ciudad para cumplir con la quedada gastronómica anual. Los banquetes de empresa recalan a su vez en algunos municipios del alfoz, aunque en menor medida. En relación a estos encuentros, «hemos tenido los justitos», asegura Goyo Rico, al frente de La Portada de Mediodía, en Torrecaballeros. «Casi tenemos más de trabajadores de Madrid que de aquí», considera, lo que atribuye a que «la gente de Segovia se cuida de conducir, por lo que prefieren reservar en la capital para luego tomarse una copa y moverse poco».
El sector hostelero es consciente de este inconveniente. Por ello, tanto Hotuse como Festur han puesto en marcha un paquete de ofertas que incluye descuentos de hasta el 20% en alojamientos. De este modo, «si una persona tiene una comida o cena en algún punto de Segovia y quieres disfrutar de ella con total tranquilidad, le ofrecemos esta alternativa para que no tenga que conducir después», destaca García Crespo. El objetivo es evitar la siniestralidad en carretera durante estas fechas.
En el caso de Hotuse, es un anuncio que queda reflejado en una revista que recopila algunos de los menús que los establecimientos presentan a sus clientes para las fechas especiales. «Lo sacamos en octubre para que la gente tuviese tiempo a la hora de ver, comparar y elegir», sostiene. Las recetas protagonistas son típicas segovianas, como el cochinillo o el lechazo; así como habituales en Navidad, como es el marisco y pescado. El abanico de precios es amplio, ya que va desde los 30 euros hasta superar incluso los 300 en caso de optar por opciones que incluye fiesta y cotillón.
A muchos no les hizo falta conocer ni el coste ni los platos propuestos para realizar la reserva. «Había restaurantes que no tenían todavía los menús pero ya contaban muchísimas mesas ocupadas; los clientes ya tienen total confianza en los negocios segovianos para concertar directamente una comida o cena», indica el gerente de Hotuse.
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«La cosa va bien, está animada: las navidades son así», coincide Santiago Ortiz, del restaurante Casares. El volumen de demanda crece durante el periodo navideño, tan solo hay que echar un vistazo a las agendas para los días más destacados de la época festiva. Si bien es cierto que la llegada de la pandemia supuso algunos cambios de hábitos, como es la menor anticipación a la hora de organizar los planes, la Navidad se constituye como una excepción. «Cada vez tienen más previsión de lo que se quiere hacer», estima Ruiz.
A juicio de la presidenta de Festur, «al final lo que se busca es cocinar menos en casa, no estar pringados en las cocinas, llegar a mesa puesta y disfrutar». Hay familias que deciden tomarse unas vacaciones y visitar lugares de la provincia, aunque eso obligue a desplazarse lejos de su hogar. «Tenemos mucho público segoviano, pero también de fuera; son muchos los que vienen a pasar las navidades aquí», celebra.
No solo se refiere al cliente más numeroso durante los puentes y festivos en la ciudad, como son los madrileños, sino también al internacional. Los comensales extranjeros que pasean por la ciudad y provincia en estas fechas «cada vez son más, están al alza». Algunos traen las mesas reservadas «desde sus países de origen», lo que ha posibilitado a los restaurantes llenar su aforo al completo mucho antes de lo habitual.
Las casas rurales ubicadas en los pueblos de la provincia se han convertido en un escenario elegido por multitud de familias que deciden reencontrarse en Navidad. Segovia se constituye como un punto de encuentro entre aquellos allegados que permanecen durante el resto del año separados. De ahí que sean los grandes alojamientos los que triunfen en las fechas destacadas del periodo festivo , como es Navidad, Año Nuevo e incluso Reyes. Es una época que «siempre» trae buenas noticias al sector. «Vamos a tener una ocupación muy alta», asegura el presidente de Asociación de Turismo Rural y Activo de Segovia, Gerardo Otero.
Este año el único obstáculo es que, al tratarse de un puente tan largo, pues las fechas más especiales «caen en martes y miércoles», hay alojamientos que intentan atraer reservas de un mínimo de cinco noches. Es decir, de viernes a miércoles. «Es algo que está complicado», subraya. Por ello, son muchos los que han apostado por hacer dos paquetes de reserva diferenciados: uno de ellos en fin de semana y el otro, en las jornadas centrales de la Navidad. «Estamos intentando aguantar por si se consigue todo el puente, pero otros se dan por vencidos y lo harán en dos veces», explica Otero.
Lo importante es que «de una manera u otra» las reservas van a ser numerosas. La tipología de alojamiento que más funciona en este periodo son las grandes casas capaces de acoger a una familia entera con varios miembros. «Hay mucha tradición de juntarse», destaca. Al estar Segovia en el centro del mapa nacional y cerca de Madrid, se convierte en un destino muy solicitado para cumplir con este objetivo. «Las casas más pequeñas cuesta un poco más alquilarlas, pero son festivos que funcionan bien de forma general», concluye.
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