El Ayuntamiento pretende crear un vial entre la avenida Padre Claret y la calle Bomberos

La operación ya tiene unos cálculos iniciáticos hechos por el Consistorio de la ciudad, que en su planificación estima el precio de venta en unos 1,6 millones de euros, según ha indicado el concejal de Hacienda y Desarrollo Económico y Empleo, Jesús García Zamora. «Primero tenemos que poner la finca a nombre del Ayuntamiento», precisa el portavoz del equipo de gobierno municipal. Una vez cumplido este trámite, comenzarán a darse los pasos administrativos correspondientes para emprender la urbanización del lugar.

La concejala de Urbanismo y Patrimonio, Clara Martín, especifica que la junta de gobierno local ha de recibir el proyecto de actuación para la normalización de las funciones previo a la enajenación. Este paso obedece a que la operación planteada por el Ayuntamiento incorpora la creación de una calle que discurrirá entre el nuevo edificio de viviendas que se levante y el conjunto que conforman la iglesia de los misioneros claretianos y el colegio Claret.

Tal y como expone la concejala, el vial unirá la transitada avenida de Padre Claret con la calle Bomberos que discurre casi de forma paralela junto al parque del Cementerio. La intención de poner en servicio esta nueva arteria no es otra que «contribuir a descongestionar el tráfico» en este punto de la ciudad. Se trata de un tramo con importantes repuntes de circulación de vehículos en determinados momentos de la jornada cuando se acercan a la confluencia de la glorieta dedicada a Dionisio Duque.

La infraestructura viaria hace que tenga que pasar por el pleno para su aprobación. Dicho vial –recuerda Clara Martín– se define en el Plan Especial de Áreas Históricas de Segovia (Peahis) como un acceso desde Padre Claret hacia Bomberos sin tener que llegar a la rotonda. Por lo tanto, la concejala de Urbanismo y Patrimonio subraya la importancia de tener «definidos los costes del vial, que irán a cargo de los costes de urbanización».

La maquinaria administrativa continuará con la licitación de la promoción de viviendas de protección que se edificarán en el antiguo cuartel de los bomberos. Según han indicado ambos representantes municipales, la empresa que resulte adjudicataria de ejecutar el proyecto construirá 56 pisos que estarán acogidos algún tipo de protección social.

Esta iniciativa ya fue citada por la alcaldesa de Segovia, en la recta final del pasado año, cuando presentó los presupuestos municipales para este ejercicio 2021. A la hora de desgranar las fuentes de ingresos para el presente curso, la regidora apuntó que cuatro de cada diez euros provienen del cobro de los impuestos directos, que en términos contantes sonantes suponen unos 27 millones de euros para las arcas del Ayuntamiento. Por su parte, la previsión de ingresos a partir del cobro de tasas y precios públicos se sitúa en 15,5 millones de euros; pero la aportación a través de los impuestos indirectos queda reducida en un 15%.

En este capítulo recaudatorio, la regidora bosquejó también como fuente de ingresos el aumento de la enajenación de inversiones reales, y es ahí donde encuadró la operación urbanística de venta de suelo en el antiguo parque de bomberos, que permitirá la construcción de esas más de cincuenta viviendas de protección. Este acuartelamiento quedó vacío de actividad hace diez años con el traslado del cuerpo y las dotaciones a las más modernas instalaciones abiertas en el complejo construido entre Nueva Segovia y los barrios del Palo-Mirasierra y Comunidad Ciudad y Tierra.

Se da la circunstancia que una de las actuaciones desarrolladas el año pasado por el Ayuntamiento de la ciudad a la hora de promover ayudas para paliar las penurias que arrastran personas más desfavorecidas o vulnerables como consecuencia de la doble crisis sanitaria y económica desatada por la pandemia del coronavirus, fue precisamente la asunción del coste del alquiler de diecinueve inquilinos de los pisos de carácter social que hay en la calle Bomberos y que fueron promovidos por la empresa municipal de suelo y vivienda Evisego. El gasto sufragado por las arcas del Consistorio ascendió a casi 16.500 euros, equivalente a la renta de nueve meses.