El Ayuntamiento invertirá 400.000 euros este año en mejoras en barrios incorporados

El cambio en el modelo de los presupuestos participativos, que en la edición de este año para su inclusión en el proyecto financiero que diseñe el Ayuntamiento de Segovia para 2023 se dirige a proyectos generales de ciudad y no tanto de cada distrito en singular, ha sentado mal en los barrios incorporados, como ha declarado Silvia Pasarón, presidenta de la federación que agrupa a estos núcleos dependientes de la capital. Sin embargo, el concejal de Obras, Servicios e Infraestructuras, Miguel Merino, cuestiona que la también edil del Partido Popular en la bancada de la oposición no se manifestara en contra del nuevo formato participativo en el consejo sectorial.

La polémica suscitada por las quejas de los barrios incorporados, que se sienten abandonados y discriminados por el Ayuntamiento de Segovia, encuentra la réplica del también concejal de Turismo. Merino destaca que el equipo de gobierno consideró a la hora de elaborar los presupuestos del presente año reservar un partida de 500.000 euros íntegra para polígonos industriales, y en particular para el de Hontoria. El edil desliga esta inyección económica de las inversiones previstas para mejorar la situación en la que se hallan los barrios incorporados.

Así, precisa que para este ejercicio se llevará a cabo por una parte un desembolso de 300.000 euros «para el conjunto» de estos núcleos de población que no se hallan ubicados «en una zona compacta urbana de concentración de población», como explica el edil. La distancia con respecto a la capital crea unas necesidades y unas singularidades «de las que somos conscientes que hay que mejorar».

Esa partida de 300.000 euros en global para los barrios incorporados tendrá varios destinos, como la renovación de redes de saneamiento, reformas en edificios municipales u obras de pavimentación. «Se están diseñando proyectos y contratos» desde la entrada en vigor de los presupuestos, manifiesta el representante del equipo de gobierno en el Ayuntamiento. A este montante, Merino suma otros 100.000 euros de inversión que se focalizarán en intervenciones en la entidad local menor de Revenga.

Con respecto a las quejas expresadas por representantes vecinales de Madrona, el edil replica que «el año pasado se renovó la cubierta» de la Casa Consistorial de este barrio incorporado y que actualmente es el centro cívico. «De no haber ejecutado esta obra, el edificio posiblemente ahora tendría que estar precintado», advierte. Asimismo, destaca la obra de demolición del velódromo, un recinto que «no se usaba y en el que había un pozo insalubre y peligroso». A estas actuaciones añade una partida económica que sufragó parte de la mejora del sistema de saneamiento. Entre todos estos trabajos, la cuantía invertida el año pasado en Madrona oscila entre los 120.00 y 130.000 euros, ensalza el concejal de Obras, Servicios e Infraestructuras en respuesta a las críticas del barrio incorporado.

El concejal precisa dos asuntos que «nos preocupan». Ambos tienen que ver con el deficiente sistema de calefacción en los colegios de Zamarramala y Fuentemilanos. El Consistorio se lo ha hecho saber a la Consejería de Educación, ya que considera que la renovación de estas instalaciones son competencia autonómica, al igual que lo son las mejoras en el transporte, la extensión de líneas ADSL o los servicios educativos y sanitarios que reclaman los barrios incorporados, matiza Miguel Merino.

Ante la falta de respuesta de la Administración regional, «vamos a abordar con fondos propios del Ayuntamiento» la renovación de la calefacción de ambos centros docentes, afirma el representante municipal, quien agrega que «no pueden estar otro invierno más con este problema».

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