El Ayuntamiento admite la necesidad de dar un impulso a las Fiestas de Segovia

El concejal de Cultura, Juan Carlos Monroy, ha gestionado una programación heredada, en cuya gestación no participó, aunque no duda en calificar de «tremendamente positivo» el balance de estos días, favorecido por las temperaturas veraniegas y la ganas de divertirse que han demostrado los segovianos. «La prueba es lo que ocurrió antes del concierto de Camela. Llovió, pero al final se pudo salvar, quizá por el ímpetu y las ganas que había, tanto del equipo técnico, como del equipo municipal, como del público en general, la policía, los bomberos... Hubo una suma de energías muy positiva que echó atrás las nubes y el concierto salió adelante con indudable éxito», señala el edil.

Aunque es muy pronto para hacer un balance en profundidad, Monroy no elude un somero análisis de lo acontecido hasta el día de hoy. «La respuesta ha sido fantástica. En todos los actos, ha habido numerosísimo público, sobre todo en los nocturnos. Es de sentido común, porque por la mañana y por la tarde la gente está trabajando. Evidentemente, es preciso dar un impulso a la organización de las próximas fiestas. Hemos tomado buena nota de los aspectos a mejorar, que los hay, y de las sugerencias que la propia ciudadanía nos ha trasladado de viva voz en la calle. En este sentido, seguiremos escuchándola, recogiendo sus peticiones para incorporarlas a futuros programas, en la medida de lo posible, siempre que sean viables y factibles», explica el nuevo concejal de Cultura.

Monroy es partidario de que la música y el deporte sigan vertebrando el programa de las Ferias y Fiestas de San Juan y San Pedro, pero no faltarán novedades en otros campos: «Música y deporte siempre gozan del favor del público. Habrá, no obstante, que hacer un esfuerzo para mejorar e incrementar las actividades orientadas a las familias, al público infantil. Los niños no viene solos, sino acompañados por sus padres. Escucharemos mucho aquellas iniciativas que planteen soluciones a necesidades familiares, de los niños, actividades diurnas, porque los pequeños tienen derecho a disfrutar de San Juan y San Pedro en sus horarios».

Los entornos vecinales, los barrios, también tendrán mucho que decir en la organización de las futuras fiestas, por lo que se desprende de las palabras del concejal de Cultura. Las asociaciones vecinales vienen reclamando desde hace años una «descentralización» de las fiestas que dé juego a todos los barrios, incluidos los incorporados y la entidad local menor de Revenga. «Tendremos en cuenta la participación de los entornos vecinales, de las asociaciones de vecinos, sus opiniones. Es una fiesta de la ciudadanía, a la que hay que escuchar para hacer más ciudad si cabe», señala Monroy, partidario de que los barrios alberguen más actividades, aporten y dialoguen entre ellos.

«No solo se trata de que los barrios participen de la fiesta, sino que dialoguen entre ellos. Es necesario derribar esas fronteras mentales que marcan la diferencia entre cada barrio y que empiecen a relacionarse entre sí, a intercambiar gustos, opiniones. Y el entorno festivo es el más adecuado para que los barrios de la ciudad se conozcan», apunta el concejal. «Aún es pronto para concretar novedades con vistas al próximo año. Surgirán en el proceso de trabajo, seguro», añade.