La luz vuelve poco a poco en un Ayllón anegado y embarrado

El caudal se ha desbordado y ha bajado como un torrente llevándose por delante piedras y tierra. El torrente dejaba a su paso un rastro de lodo y algunos desprendimientos que han ocasionado cortes en la carretera de acceso a Ayllón. Entre las cinco y las seis de la tarde, la tromba ha sido incesante, y el pedrisco ha impactado también sobre el mobiliario urbano y los vehículos.

Hasta el lugar del suceso se han desplazado dotaciones de bomberos de la capital segoviana y de la vecina Sepúlveda, informa la nueva alcaldesa ayllonesa, Rosa Martín. Los equipos de Protección Civil y grupos de vecinos han estado horas achicando agua de las calles, establecimientos y bajos de viviendas. El alcantarillado no daba abasto.

Una vez ha escampado, y con el paso de las horas y las tareas para desembalsar el agua acumulada, este domingo por la noche todavía había entornos anegados. Muchas áreas son un lodazal por al arrestre de tierra y piedras. También la tromba ha afectado a algunas habitaciones de la residencia de ancianos, lamentaba la regidora. A primera hora de la noche el pueblo estaba sin suministro eléctrico. Este apagón ha dificultado, por ejemplo, el traslado de mayores del citado centro en ascensor.

La luz ha ido volviendo poco a poco a los hogares de los aylloneses. La recuperación ha sido por fases, aunque en las últimas horas del domingo aún las calles más damnificadas por las inundaciones seguían a oscuras, apuntan algunos vecinos.

«Estamos desbordados», repetía por la tarde Rosa Martín. Los daños materiales son cuantiosos, pero los esfuerzos se concentraban en achicar el agua e intentar restablecer servicios básicos y las conexiones. El río desbocado se ha desmandado por el centro de Ayllón. En algunas zonas, manifestaban varios afectados, «el agua nos llega por encima de la rodilla». Más de medio metro de agua acumulada, a lo que se añadía el granizo de gran tamaño que ha penetrado en algunas casas y negocios.