Un segoviano al frente de un grupo de aventureros para redescubrir América

Su pasión por la aventura surge de aquellas experiencias, «increíbles y emocionantes», dice. De «haber sido partícipe de vivencias y situaciones que ni yo mismo hubiera podido imaginar».

Las sigue imaginando. En 2014 puso en marcha el Proyecto Argo, para aventureros ya de más edad, dispuestos a «redescubrir América, a redescubrir nuestra historia (la de España) en el continente americano, que ni ha sido bien tratada ni suficientemente bien contada. Hay mucha leyenda negra, incluso aquí, cuando deberíamos estar orgullosos de todo lo bueno que hicieron los españoles allí, que fue mucho». Ángel Galicia cita en la documentación de su proyecto una frase de Federico García Lorca que ilustra bien el ánimo que le mueve: «El español que no conoce América, no sabe lo que es España».

Los últimos viajes, siempre en verano, han sido a Cuba, Ecuador, México, Perú (2017), Colombia (2018) y este año a Costa Rica y Panamá, para volver a hacer parte de la ruta que recorrió hace unos años con Miguel de la Quadra, 'La Ruta de los Huracanes' que Cristóbal Colón también hizo a su pesar, porque en esta parte de la costa de Centroamérica las tempestades le pusieron más que difícil la navegación.

Este mes de agosto, el viaje fue también una ocasión para recordar al fundador de la ciudad de Panamá. Fue un segoviano, Pedro Arias Dávila, conocido como 'Pedrarias' quien fundó Panamá hace 500 años, el 15 de agosto de 1519, y fue el suegro de Álvar Núñez de balboa, padre de Vasco Núñez, gobernador del itsmo.

Como es obvio, el nombre del Proyecto Argo confirma sus raíces aventureras, la idea de que los viajeros que le acompañen se conviertan en «los nuevos argonautas». Es otra filosofía de viaje, distinta de la que ofrecen las agencias en sus catálogos, inspirada en cierto modo, explica Galicia, en los viajes de Jasón y sus compañeros, porque, «buscamos un vellocino de oro, un poco más de sabiduría por caminos poco trillados», con la intención también de que cada uno conozca sus cualidades en una experiencia vital distinta, con esta forma de viajar.

De ahí que quienes le acompañen ya no sean jóvenes como en la Ruta Quetzal ni el grupo tan numeroso. El perfil es de personas entre 40 y 50 años, en un grupo de 20 plazas de las que, en la práctica, la mitad están reservadas de antemano.

Comenta Ángel Galicia que la mitad, en los viajes realizados desde hace cinco años, son profesores, desde Educación Infantil a Secundaria y Bachillerato, y tres de cada cuatro, mujeres. «Quizá porque las mujeres son más inquietas, curiosas y aventureras», matiza, y aclara acto seguido que en los grupos ha habido «más 'singles' que parejas».

Galicia pretende cerrar la próxima expedición del Proyecto Argo a finales de noviembre, como siempre con los participantes pagando de forma prorrateada los costes. La idea es hacer entonces el llamamiento para cubrir las plazas disponibles a través de las redes (su perfil de Facebook y su web), y la intención inicial es viajar el próximo verano a Ecuador y las Islas Galápagos, para rememorar el descubrimiento del archipiélago de las Islas Galápagos por el dominico soriano Fray Tomás de Berlanga el 10 de marzo de 1535.

La incertidumbre política de Ecuador y la dificultad de viajar a las Galápagos si se encona la situación mueven al aventurero a pensar en una expedición alternativa. Sería a Bolivia, para subir a los Andes, hasta el lago Titicaca y bajar a las selvas de la Amazonia boliviana. De nuevo en una «mezcla de recorrido histórico y cultural».

Está por decidir en función de cómo evolucione la situación política en Ecuador. Si es posible, buscará financiación (con 'micro patrocinios' de empresas y de alguna productora o cadena de televisión) para incorporar un equipo de televisión que ruede un documental. El objetivo, unas islas que son una enciclopedia de la evolución y Reserva de la Biosfera.