El arzobispo de Peñafiel, Francisco Javier Lozano Sebastian, fue el encargado de pregonar las fiestas de Villaverde de Íscar en honor a Santa Librada. Además de pronunciar el pregón, el arzobispo también fue homenajeado por la localidad en la que nació, con el descubrimiento de un monolito y una placa conmemorativa en un parque que desde este fin de semana lleva el nombre del prelado.
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El programa de fiestas, que continuará a partir del jueves, ha contado con una marcha por los caminos del municipio, una charla por parte de la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer de la Comarca de Íscar (AFACI), una quedada de vehículos clásicos y antiguos o la tradicional degustación de una gran paella popular de la que dieron cuanta casi medio millar de personas. También se celebró una pasarela homenaje de moda con varias firmas.
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