«Hace 70 años hubiera sido mucho más duro, ahora hay más medios para comunicarnos»

La cuellarana Isabel Quevedo, técnico superior de Anatomía Patológica y Citología, trabaja en el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, en Cantabria. Señala que no es momento de relajarse, aunque se están reduciendo el número de casos e ingresos, lo que achaca a que la gente «se está portando y está guardando la cuarentena». Anima a seguir cumpliendo las normas, pero también las medidas de higiene y seguridad.

Quevedo trabaja en el análisis de pruebas de los enfermos. Asegura estar pasando estos días «con miedo, como todo el mundo, pero tranquila», pues piensa que el contagio se puede evitar cumpliendo las normas de distancia de seguridad y con el uso adecuado de mascarilla y guantes. Incide en el uso de estos elementos, siempre que se realice una utilización adecuada, apuntando que pueden llegar incluso a ser peligrosos «porque te da una sensación de seguridad que no tienes. Llevar guantes sí protege, pero si los sabes usar y luego te los sabes quitar». Para ella, lo más importante en estos momentos son los EPIs, las medidas de precaución, seguir las normas, el lavado de manos y la distancia de seguridad, además de «quedarte en casa».

Ella señala que no se encuentra en primera línea «de fuego», puesto que no trata directamente con pacientes, sino con sus muestras. «Yo me siento segura en mi servicio, tenemos EPIS, y aunque los están controlando para que no hagamos un uso indebido, no nos faltan».

Otra batalla que libra Isabel es la personal, puesto que lleva semanas sin ver a su familia, que está en Cuéllar. «Echas mucho de menos a la familia, te sientes un poco atrapada. Quiero ir y no puedo, quiero ver cómo están y no puedo. Emocionalmente te ataca un poco», explica, aunque señala que gracias a las videollamadas y la tecnología lo lleva bastante mejor. «Si esta pandemia hubiera sido hace 70 años, habría sido mucho más dura. Ahora tenemos muchos medios para comunicarnos».

Pide a la población «tranquilidad», asegurando que el sistema sanitario está organizado. «La gente está trabajando a destajo, se está haciendo todo lo que se puede», y anima a continuar en casa, porque «si nos portamos bien, se acaba pronto». También incide en el cuidado con las mascarillas caseras, que no son efectivas al 100%, y pide precaución al quitarlas, «nunca tocarlas por dentro, cogerlas de la goma».

También recomienda tener cuidado con los bulos y escuchar en todo momento a los sanitarios.