Segovia

La alternativa del Pontón abastecería a La Granja solo «si es necesario»

El sistema actual compartido «da prioridad» al consumo en boca, añade Samuel Alonso. Y la pretensión del Ayuntamiento es que siga siendo así, con independencia de que el agua proceda del Mar o del bombeo necesario desde el Pontón si se construyen las conexiones con el núcleo urbano de La Granja. El regidor recuerda que ya hay una conducción desde la estación depuradora de La Atalaya, por donde pasaría para su tratamiento el agua extraída del embalse situado en el término de Palazuelos de Eresma antes de llegar a los domicilios. Hace años se hizo una prueba y se comprobó que este sistema de bombero cubría solo el 40% del abastecimiento del núcleo de población, especifica Alonso.

Por eso, el regidor defiende que, «si fuera necesario, habría que dimensionar el abastecimiento para que llegue al 100%; pero la principal fuente de suministro de La Granja seguiría siendo El Mar».

Las explicaciones no convencen a vecinos que rechazan el proyecto. Aunque el alcalde hace hincapié también en que «no hay nada cerrado» y que el convenio con la sociedad Acuaes no está firmado, el proyecto cuenta con voces contrarias que defienden la alternativa de recurrir a otros arroyos y manantiales próximos al municipio.

El plan en el que se trabaja desde hace meses consiste en que la nueva instalación captaría el agua del Pontón hasta la estación depuradora de La Atalaya. A partir de ahí habría que crear una conducción desde el instituto de La Granja que atravesara la calle del Pocillo, cruzara por la zona conocida como La Faisanera hasta el depósito del Nuevo Chato, con el consiguiente dispositivo de bombeo para salvar el desnivel.

El alcalde del Real Sitio ataja los comentarios que critican el coste económico de esta intervención negociada por el Ayuntamiento, Acuaes y Patrimonio Nacional y su posible repercusión en la tasa del agua. «De momento no se plantea nada porque, entre otras cosas, no hay nada cerrado», reitera al preguntarle por el coste para los ciudadanos. Alonso agrega que los trabajos técnicos para ver cuál es la mejor opción continúan, siempre partiendo de la premisa de que la alternativa se usaría solo cuando el estanque del Mar estuviera en mínimos y fuera incapaz de abastecer a la población, que es «prioritaria» frente a los Jardines Monumentales del Palacio Real y los juegos de las fuentes. Ese déficit puede venir por un prolongado periodo de sequía o porque, por ejemplo, el agua es de mala calidad o por algún fallo en el sistema de suministro, apunta el regidor.

Frente a las comentarios contrarios al acuerdo, insiste en que, «si no es necesario, los vecinos no van a beber de La Atalaya»; y al mismo tiempo defiende la necesidad de contar «con un segundo punto de abastecimiento» para hacer frente a situaciones «excepcionales».

En referencia a los pasos que se han dado hasta ahora, Samuel Alonso desgrana que «Acuaes mandó un borrador tipo del convenio». En 2022, la declaración de interés general por parte del Ministerio habilitó una partida de dos millones de euros para el desarrollo del proyecto.

Sin embargo, quienes se vienen oponiendo se quejan de que Patrimonio Nacional y el Ayuntamiento lo que quieren es 'desvincular' los canales de suministro.