Las agencias de viajes de Segovia facturaron en verano un 70% de lo que hace tres años

Esta caída en el sector turístico de las agencias de viajes se achaca principalmente al bajón en los viajes internacionales de larga distancia ya que «para obtener el volumen de un viaje así hacen falta casi cinco viajes de media o corta distancia». La necesaria previsión de viajes de gran calibre (Asia, América…) hacía que su planificación tuviese que empezar en los meses de mayo o junio cuando «todavía estábamos aterrizando en la realidad». Una realidad un tanto distorsionada por los europeos en la que se extrapolaba la situación del continente al resto del globo, cuando en verdad había países que, con sus políticas pandémicas, espantaban al turista, en especial en Asia. «Japón, uno de los destinos que los últimos años venía pegando fuerte, hasta hace tres semanas no ha abierto fronteras sin restricciones, antes te pedían cuarentena. En muchos países fuera de Europa todavía eran necesarios unos requisitos que desincentivan a la hora de viajar porque si te tienes que estar haciendo PCR, formularios… la gente no quería tener complicaciones de vacaciones y prefería irse a otro sitio. Pensaban que ya irían más adelante a esos sitios». Es decir, pese a que el volumen de viajes ha crecido, la falta de desplazamientos de larga distancia ha conducido a unos ingresos maniatados. «El tema internacional de larga distancia es algo fundamental para nosotros: América, Asia… por no hablar de China o Rusia, esos ni han estado ni se les esperaba», apunta García-Patiño. Los turistas segovianos han optado este verano por lo seguro: viajes nacionales, islas y Europa —donde siguen mandando las principales capitales—.

Respecto a las previsiones para otoño reina la cautela. «Las ganas están, pero la cautela y el miedo también. El encender todos los días la radio o la televisión y empezar a escuchar lo que escuchamos todos no ayuda nada. Es normal», comenta el presidente de la ASAV. El panorama de inflación desatada, subida energética… hace que muchos segovianos sean reticentes a lanzarse a planificar viajes otoñales con cierto anticipo. «Este es un sector muy asustadizo, en el momento en el que hay cualquier cosa de estas…. el viajar, y sobre todo por placer, la gente lo hace esperar».

Para el puente de diciembre se mantiene la misma expectativa, la venta se hará esperar. Navidad en cambio se percibe desde el sector de las agencias como una época en que la gente aprovecha para hacer un buen viaje.