La acumulación de nieve y hielo en aceras, primera preocupación en la capital segoviana

El mayor problema con el que se encuentra el dispositivo del Ayuntamiento de Segovia es la persistencia de la nevada, sobre todo en cómo esta constancia afecta al estado de las aceras, ya que, aunque se limpien, al poco tiempo vuelven a estar cubiertas de nieve. Con la dificultad añadida, matiza el concejal, de las bajas temperaturas que congelan el manto blanco formando inportantes bloques de hielo, con el consiguiente peligro que suponen para los transeúntes.

Ángel Galindo expone que, de momento, la estrategia es mantener las calzadas lo más limpias posible mediante el esparcimiento de sal a través de las máquinas disponibles y del personal movilizado. Al mismo tiempo, también se está echando material fundente en las aceras, pero dosificando «y buscando el equilibrio» en ese reparto por el motivo al que aludía el edil de que al rato el tramo donde se ha intervenido vuelve a estar nevado.