Acrobacias en el Peñascal

Con unos minutos de retraso pero con música para acompañar la espera, fueron las acróbatas que componen el trío Wise Fools las encargadas de abrir el ciclo con su espectáculo 'Trashpeze', un número de trapecio en trío combinado con danza en las alturas. Con un columpio colocado a más de cinco metros de altura, las tres acróbatas –dos finlandesas y una sudafricana– mostraron sus exclusivas técnicas de triple trapecio, algunas de las más difíciles y divertidas que pueden verse hoy en la escena circense europea.

En primer lugar ofrecieron al numero público su habilidad para permanecer sujetas a varios metros de altura en decenas de posturas diferentes. Agarradas al trapecio y con el apoyo de sus propias compañeras, giraron a gran velocidad desafiando a la gravedad para asombro de un público que poco a poco comenzaba a entrar en calor. Lo hizo definitivamente con el ejercicio central del espectáculo, en el que una de las acróbatas utilizó el columpio para impulsarse con intensidad. Los descensos, espectaculares y variados, lograban convertir los gritos de asombro de los espectadores en aplausos en los que también se respiraba cierto alivio por comprobar que la acróbata se mantenía bien sujeta al columpio.

En segundo lugar, y ya sin apenas rayos de sol molestando al público asistente al Peñascal, llegó el turno del alemán Jan Maske y su propuesta 'Djuglelin'. «Es la primera vez en años que actúo ante una plaza tan llena», dijo al principio de su espectáculo para intentar meterse en el bolsillo a la gente que acudió al Peñascal. Tradicionalmente frío, el público segoviano fue entrando poco a poco en calor gracias a las bromas y al sentido del humor del alemán, galardonado con el Pavé de oro en el Festival de Artistas de Calle en Vevey y vencedor del Certamen Intergaláctico del Festival de clown de Vigo. Virtuoso con el diábolo entre sus bastones, asombró tanto lanzándolos al cielo de Segovia como con pequeños trucos que engañaban a la vista.

Por último, el actor belga Elastic puso el broche al festival Circo Peñascal con 'The gag man', uno de sus números más conocidos y difundidos por Europa, en el que combinó malabares, sentido del humor y gags visuales que consiguieron deleitar al público que se dio cita en el parque del barrio de La Albuera.