Las aulas de Sangarcía tramitan alegaciones para volver al María Moliner

Las familias de los alumnos que cursan sus estudios escolares en las aulas de Sangarcía han registrado las pertinentes alegaciones ante la Dirección Provincial de Educación en las que reclaman que se les devuelva la adscripción al instituto María Moliner de la capital segoviana, donde «han estado yendo durante más de veinte años», esgrimen los padres afectados. El ejercicio pasado entró en vigor la modificación en contra de la opinión de las familias.

Dicho cambio de adscripción, por el que se establece la asignación de los alumnos al instituto Catalina de Lancaster, situado en Santa María la Real de Nieva, ya desencadenó el malestar de los padres en el 2015-2016. Para dejar patente su desacuerdo interpusieron tres escritos en contra de la medida. En sus alegaciones, reiteran que la opción a la que les deriva la Administración regional merma las alternativas de estudios de sus hijos, ya que en el centro al que Educación les ha adscrito ahora «se imparten solo dos de los cinco bachilleratos y tampoco ofrece Formación Profesional», expone la agrupación.

Ya hay rutas de transporte

La asociación de padres también se hace eco de la contrariedad por el silencio de la Dirección Provincial, que «no nos ha respondido» a las peticiones formuladas para volver al instituto María Moliner. El colectivo justifica que la demanda tampoco supone un gasto a mayores para las arcas oficiales, ya que «la ruta de transporte a Segovia sigue existiendo, porque hay alumnos estudiando en Segovia».

Entre los apoyos recabados por la demanda de los padres están las de todas las familias que tienen a sus hijos en el centro rural agrupado de Sangarcía, donde además estudian niños de Etreros, Cobos, de la urbanización Pinar Jardín, Bercial y Marazuela, cuyo Ayuntamiento también ha mostrado su adhesión, al igual que el de Sangarcía.