La reñida concesión de la línea Segovia-Madrid

El plazo para la presentación de ofertas acabó el día 8. El Ministerio de Fomento mantiene la prudencia lógica que marcan los tiempos administrativos, por lo que será muy difícil que antes del martes 21, fecha prevista para la apertura de los sobres, pueda saberse a ciencia cierta cuántas empresas han entrado en liza para hacerse con la concesión de la línea de transporte de viajeros por carretera que une Madrid y Segovia con prolongación hasta la localidad burgalesa de Melgar de Fernamental.

Así que tengan un poquito más de paciencia. Toca esperar. No será demasiado, si se tiene en cuenta que la concesión que gestiona el grupo La Sepulvedana se mantiene prorrogada, ya que caducaba en 2013. Pero por si hay ganas de algún anticipo, sepan que el sector de ha movilizado por hacerse con la línea. Y mucho.

La industria del transporte se ha volcado en la puja. El servicio que viene prestando el personal y la flota de La Sepulvedana se antoja muy deseable, a pesar de la feroz competencia que supone la alta velocidad ferroviaria, la cual ha ido comiendo terreno a la carretera y captando cada vez más viajeros para los trenes Avant en detrimento de los autobuses.

La renovación

La mejor muestra de la que la concesión por diez años que tramita el Gobierno de la nación, a través del Ministerio de Fomento, es un plato de muy buen gusto para la industria del transporte por carretera es la cantidad de ofertas registradas en plazo. Es más que posible que la concurrencia al procedimiento pueda rebasar la decena de propuestas. Pero no solo destaca la cantidad, también la notoriedad de las firmas que aspiran a explotar la concesión.

La Sepulvedana es una de ellas. La experiencia es un grado para la renovación de la concesión. Recientemente, la compañía ha continuado con su adaptación, en la medida de sus posibilidades, a las reivindicaciones de mejora que hacen los viajeros y ha añadido un autobús directo a las 6:15 horas entre la capital segoviana y la madrileña para intentar solucionar el problema de demanda que hay a primera hora.

En esa liza también han entrado un buen puñado de grandes y medianas empresas cuyos nombres son de sobra conocidos. Por ejemplo, el grupo Avanza, Alsa, Globalia, Ruiz o Linecar son solo algunas de las firmas que han registrado su oferta con la intención de que sea la más ventajosa para resultar la adjudicataria del servicio. Lo cierto es que el pliego de condiciones que publicó el Boletín Oficial del Estado (BOE) a comienzos del año introduce alguna novedad con respecto al que aún rige la concesión.

La línea de La Granja

Una de las más llamativas es que la propuesta de rutas queda reducida a trece cuando antes había veintidós. Además, una de las reclamaciones que venían realizando los distintos colectivos de usuarios del transporte entre Madrid y Segovia ha sido atendida en el pliego. Dicha demanda consistía en tener en cuenta el calendario académico de las universidades, por lo que los cuatro recorridos universitarios se tendrán que ejecutar entre el 1 de septiembre y el 30 de junio.

Asimismo, la Junta de Castilla y León ha pedido la segregación ­como informaban fuentes de la plataforma de transporte­ de la línea de autobús que hace el recorrido entre Segovia, Parque Robledo, La Granja y Valsaín, por lo que será la Administración regional la que se encargue de su gestión, que ya disponía de bonos de subvenciones, aunque los precios del billete sencillo estén regulados por el Ministerio.

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