La pelea multitudinaria comenzó «cuando le vieron salir del baño con la cara ensangrentada»

Una pelea multitudinaria en una discoteca de la localidad de Navas de Oro se saldó con cuatro jóvenes heridos: una mujer de 26 años, V.H., y tres hombres de 34, 24 y 22 años, F.H., C.P. y O.G.G., respectivamente. Todos ellos fueron trasladados al centro de salud de Nava de la Asunción, según informó el Servicio de Emergencias 112.

La pelea se inició alrededor de las seis de la mañana en la discoteca San-Bar, situada en la plaza de La Orceña. Según explicó su responsable, Borja Sanz, un joven de nacionalidad rumana salió apresuradamente del baño del local tras reventar presuntamente un botellín en la cara de otro joven del pueblo. «En principio, parece que iba bebido, porque esa conducta es muy poco normal, pues han venido otras veces y no han dado ningún tipo de problema y si hubiésemos notado algo raro en ellos, no se les habría dejado pasar. Según nos contó luego el chico agredido, con el que tengo bastante trato, le rompió el vaso en la cara sin más preámbulo. Luego el agresor intentó huir a la calle llevándose todo por delante, le daba igual chicas que chicos, a golpes con todo el mundo», relata Sanz.

El altercado fue a más cuando los conocidos del joven agredido le vieron salir con la cara ensangrentada del baño. «Entonces fueron a por el agresor, al que se le unió otro joven también de nacionalidad rumana que venía con él. Y ya se unió toda la discoteca a por estos dos», resume el responsable del local.

Vasos y botellas por el aire

Fue el momento de mayor confusión, ya que además de golpes, en la pelea se lanzaron vasos y cascos de botellines. El propio responsable de la discoteca, que se encontraba tras la barra cuando se inició la pelea, intentó mediar, pero, según explicó, también recibió un fuerte golpe en la cabeza por parte de uno de los dos jóvenes de origen rumano. Hasta el lugar se desplazaron agentes de la Guardia Civil y dos ambulancias para atender a los heridos «Lo primero que hice fue llamar a la Guardia Civil y se presentaron enseguida. Cuando llegaron, los sacaron y los escoltaron. Después, los heridos fueron trasladados al centro de salud de Nava de la Asunción para curarles las heridas», señala Borja Sanz, quien, al igual que los lesionados, tuvo que acudir a declarar y contar su versión de los hechos en el cuartel de la Cuardia Civil de Coca.

El herido de más consideración, explicó, tuvo que ser intervenido quirúrgicamente para reconstruirle la parte de la oreja donde recibió el impacto del casco de botellín.

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