El vermú más esperado

Cuando se habla de fiestas, se habla de ocio y tiempo libre, donde caben todo tipo de actividades para divertirse. Carbonero destaca por la buena hospitalidad de sus vecinos durante las fiestas, para que nadie se sienta forastero y es que, la tradición no se pierde ni se rompe, sino que se acrecienta. El ambiente festivo se nota en las calles y plazas de la localidad de Carbonero el Mayor, a la hora del vermú y los almuerzos mañaneros. La música callejera y el final de los encierros, marcan la hora de los típicos almuerzos en la Plaza Mayor, donde ayer lunes, la peña San Fermín por séptimo año consecutivo, repartió más de 500 raciones del almuerzo del segador (dos huevos fritos, lomo, chorizo y pan) realizado por cuatro cocineros que lo servían emplatado y de forma gratuita, a todos los que se acercaban a la fila.

Según el testimonio de David, presidente de la peña San Fermín, la agrupación se fundó hace cincuenta años por sus padres, ellos entraron siendo niños y siguen ahí. Hoy cuenta con unos 390 socios con edades desde 1 a 64 años, aunque a los menores no se les cobra la cuota. La directiva está formada por tres o cuarto socios de diferentes edades, que se comprometen a cumplir con la normativa de la peña durante su mandato, y este año, han celebrado su cincuenta aniversario el día 16 de julio con una gran fiesta. Durante las fiestas patronales llevan merienda a los toros para todos: empanada, pizzas, bocadillo...

Por otro lado, la peña Los Terribles y El Brochazo, ofrecieron una panceta popular gratuita en la terraza del bar Kriscol al mediodía. El resto de peñas de la localidad Ancoras, La Tinaja o La Cuba han contribuido igualmente a ambientar las calles a la hora del vermú, pues todas ellas se han asociado para pagar a las charangas que contratan durante la fiestas.

Así se viven las fiestas en Carbonero el Mayor.