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César Blanco Elipe
Jueves, 18 de agosto 2016, 08:37
Las vacaciones no calman la marejada en la ha de navegar la profesión médica. Más bien todo lo contrario, porque el verano es época de sobrecargas de trabajo y acumulación cupos de compañeros. Todas ellas quejas que se repiten ejercicio tras ejercicio.
Al igual que el cierre de camas en los complejos hospitalarios, aunque este año no hay constancia de que el Hospital General de Segovia haya adoptado esta medida. El Colegio Oficial de Médicos de Segovia levanta la vista del calendario estival y los problemas que lo marcan y la dirige a un horizonte temporal no muy lejano.
En él otea un problema «grave» del que ya ha venido advirtiendo el presidente de la institución. Enrique Guilabert insiste en el temor a la falta de relevo generacional en las plantillas de galenos. Sobre todo, en la Atención Primaria. No hace ni medio año que el máximo representante colegial aventuraba con tono de certeza que «de aquí a cinco años se jubilarán 65 médicos de familia, la mayoría con la plaza en propiedad».
El dato estaba extraído de un reciente estudio presentado por los órganos profesionales de Castilla y León, el cual vaticina poco menos que una avalancha de bajas de efectivos motivadas por haber cumplido la edad estipulada para el retiro laboral. Ese aluvión no solo afectaría a la provincia, sino que se extendería a las plantillas activas del primer nivel asistencial a lo largo y ancho del territorio autonómico; aunque las áreas de salud más damnificadas serían, por este orden, las de Salamanca, Ávila, Valladolid Oeste y Segovia. Son las que presentan las mayores proporciones de personal a las puertas de la jubilación.
Restitución «ínfima»
Enrique Guilabert considera que el actual marco laboral es injusto. Explica que hay «profesionales extraordinarios que están a los 65 años están activos, a pleno rendimiento y con una experiencia que es fundamental en el desempeño de este trabajo». Por otra parte, se lamenta de que «es ridícula la ampliación en los MIR porque es ínfima».
El máximo representante de los facultativos segovianos ya llamó la atención, en el acto de despedida y bienvenida a los residentes, sobre «lo mucho que está perdiendo nuestro hospital en lo que a MIR se refiere con respecto a otros años». Y concretó su reproche en la Medicina de Familia y Comunitaria.
Ante un escenario tan poco halagüeño, la Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM) prepara una propuesta que retoma la demanda de fijar la jubilación al llegar a los 67 años con la posibilidad de ampliarla hasta los 70 si el profesional reúne los supuestos que ya recoge la Administración para la concesión del actual alargue de la actividad, amén de la voluntad del facultativo. Estas excepciones son que personas se encuentran inmersos en tareas de investigación, ser los únicos especialistas en una técnica sanitaria o pertenecer a una área asistencial deficitaria. Según el presidente, el Colegio Oficial de Segovia estaría dispuesto a la apoyar los planteamientos que sustentan la reclamación de la central sindical.
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