La Nava, con Ecuador

La iniciativa solidaria celebrada el pasado fin de semana en el salón de usos múltiples de Nava, ha conseguido recaudar finalmente 1.200 euros que irán destinados a los afectados por los terremotos de Ecuador de las últimas semanas. El promotor de la iniciativa Raúl Ajo se muestra satisfecho: «Estuvo bien, hubo actuaciones para todo tipo de público, un público más mayor al principio y más jóvenes después», señala, mientras destaca las actuaciones de Julio Baeza, Pedro Lobo o el niño Juan Vivanco, además de Santos Gómez, Fede García o el grupo K-rroña de Uña. Raúl hace balance también de la recaudación de entradas y barra: «Las entradas de la fila cero se pudieron adquirir hasta el domingo y todo el dinero de la barra fue limpio, gracias a las donaciones de Congelados Segovia y a que ningún camarero cobró. Los carteles también nos los hizo gratuitamente imprenta Rosa donde trabaja Monse».

Monse Lucas es la ecuatoriana por la que empezó toda esta iniciativa solidaria. Varias de las familias que se quedaron sin hogar por el terremoto decidieron pedir a la madre de Monse, Bélgica Guaranda, que abriese una parcela vallada de su propiedad en la localidad de Montecristi, para que pudieran pernoctar allí en lugar de en plena calle. Los familiares de Monse no lo dudaron y finalmente fueron cuarenta familias las que se alojaron en su terreno, de poco más de 1.250 metros cuadrados, provisto de un baño y agua corriente, además de una zona techada y pavimentada. Desde entonces, Bélgica se ha empeñado en facilitar el día a día a todas estas familias, pero los recursos son escasos y tan solo han podido regresar a sus hogares reconstruidos, cuatro de las cuarenta familias, el resto permanece en esta parcela campamento. Aunque Monse tiene su residencia en Carbonero el Mayor, pertenece a una Asociación Sociocultural Hispanoamericana, con sede en la localidad madrileña de Collado Villalba, con la que recientemente lograron recaudar cerca de 4.000 euros que, a través de la embajada ecuatoriana, también enviaron a los damnificados por el terremoto. «Lo hicimos con la mejor intención, pero no sabes con seguridad si llega. Sin embargo, lo que se ha recaudado aquí, sí sabemos dónde va a parar», comenta Monse mientras termina de repartir trozos de tarta típica ecuatoriana entre algunos de los asistentes a los conciertos.