La Junta augura abrir más expedientes a la planta de compostaje

El delegado territorial de la Junta en Segovia, Javier López-Escobar, anunció ayer que el expediente disciplinario que está en curso contra la planta de compostaje de Fuentepelayo «no será seguramente el único». Según indicó, los técnicos de la administración autonómica aún tienen que revisar más parcelas en las que la citada planta podría haber realizado vertidos irregulares. La Junta mantiene las medidas cautelares que adoptó los pasados días entre ellas la prohibición de que la empresa recepcione nuevos residuos y tiene pendiente realizar nuevos análisis, revisar la licencia ambiental, atender solicitudes que ha realizado la empresa y depurar responsabilidades por los vertidos irregulares que ya se han detectado, informa Ical.

Esas responsabilidades podrían alcanzar a los dueños de las parcelas en las que se depositaban residuos y a los propios transportistas que participaban, según indicó esta mañana el delegado territorial de la Junta, que se comprometió, por su parte, a facilitar toda la documentación de las inspecciones llevadas a cabo sobre la planta a Ecologistas en Acción, CCOO, UGT y Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL).

Estas organizaciones realizaron ayer en la Comisión Territorial de Medio Ambiente y Urbanismo una serie de preguntas sobre la actividad de esa empresa. Entre otras cuestiones plantearon por qué el Servicio Territorial de Sanidad, a instancias de la Comisión de Urbanismo, emitió un informe favorable a la planta en abril de 2010 «si el municipio de Fuentepelayo había informado negativamente».

También quieren conocer las circunstancias que han desembocado en la situación actual de acumulación de vertidos irregulares en parcelas de Fuentepelayo y, apuntan también, de Zarzuela del Pinar, y se han interesado por la tramitación que efectuó la Junta de los informes del Seprona sobre «un vertido de gran cantidad de tripas en una parcela agrícola y por otro vertido de sangre en la Laguna de Llosa, de Fuentepelayo, que no sirvieron para evitar el desastre al que se ha llegado en la actualidad».

Además, preguntaron a los responsables de la administración autonómica si en los vertidos irregulares han podido estar implicadas otras personas al margen de la planta de compostaje «y cómo, cuándo y por quién se abordará la restauración del medio ambiente de Fuentepelayo y su entorno ante la contaminación sufrida por el suelo, el agua y el aire».

El responsable de la plataforma No más Mierda, José Luis Ordóñez, que acudió acompañado de otros miembros, aseguró que la situación de tensión que vivía el municipio se ha rebajado y se mostró favorable a que la planta continúe su actividad «si se dedica a la fabricación de compostaje y acaba con las actividades que han puesto en riesgo la salud en la zona».