Borrar
María Dueñas (izquierda) atiende a la introducción de Ana Gavin en el acto de este viernes del Hay Festival.
La seducción literaria de María Dueñas conquista el primer acto del Hay Festival

La seducción literaria de María Dueñas conquista el primer acto del Hay Festival

La autora machega analiza con Ana Gavin su tercera novela, 'La templanza', cuya lectura ha prologado este viernes la décima edición del foro literario y de las ideas

César Blanco Elipe

Viernes, 11 de septiembre 2015, 23:01

Woodstock fue mucho más desarrapado, lisérgico, caótico y desmadrado. Sería difícil de imaginar a la serena elegancia de María Dueñas vestida con los chalecos, las gafas y las diademas floridas de Janis Joplin. Y ni por asomo vislumbrar al respetuoso, maduro y solemne público del Hay Festival segoviano quemar guitarras eléctricas a lo Jimi Hendrix o tumbarse en el mimado y coqueto patio interior del Palacio Quintanar, con un fondo pétreo y medieval que todavía le confiere una mayor sobriedad.

Si el que fuera presidente de los Estados Unidos, Bill Clinton, viviera el encuentro cultural y artístico de la ciudad castellana, es más que probable que buscara otro apelativo para el Hay Festival distinto al de 'el Woodstock de las ideas', que es como bautizó la versión original galesa. La franquicia se ha extendido por todo el mundo y Segovia es la única superviviente española después de que Granada no lograra la pervivencia de su festival.

El carisma narrativo y personal (o viceversa) de Dueñas se apropió de la velada de ayer. Fue la protagonista de la primera de las más de cien citas que tendrá la décima edición segoviana del Hay, que con tan redondo aniversario ha querido alargar a diez días la celebración cultural, filosófica y artística. La autora manchega, de Puertollano más concretamente y con antecedentes mineros en la familia, parece más ordenada, al menos en su discurso y en su proceso creativo que aquellas figuras que hicieron de Woodstock un icono de una generación de estadounidenses hastiada de las guerras y que pregonaba la paz y el amor como modelo vital.

Amena, didáctica y cercana en su trato desde el estrado compartido con la directora de la Fundación José Manuel Lara, Ana Gavin, la autora de 'El tiempo entre costuras', 'Misión olvido' y 'La templanza' pareció recordar los años académicos como profesora en la Universidad de Murcia. Dos decenios de docencia que evoca como «entrañables», aunque ahora confiesa sentirse más cómoda en su faceta literaria.

«Con las mismas ganas»

Al fin y al cabo, eso es lo que le pone frente al espejo de la revolución de Woodstock: la ilusión por idear y crear. En su caso, confeccionar historias que seduzcan al lector con honestidad y humildad como denominadores comunes en su ideario. Esa puede ser la fórmula de su éxito, la de intentar conquistar a los lectores «uno a uno». Y encuentros como el Hay Festival son idóneos para poner en práctica esa teoría.

Tal y como comentó la propia María Dueñas, cada proyecto novelístico lo aborda «con las mismas ganas y la misma curiosidad por aprender para volcarlo de forma que atraiga al lector». Dueñas atrapa. La lectura de unos fragmentos de 'La templanza' ha dado fe de esa seducción este viernes en el que el Hay Festival ha escrito su décimo prólogo. Empezó la lectura la madre de la criatura, de la que ya se han editado más de medio millón de ejemplares; prosiguió la alcaldesa, Clara Luquero, que cedió el turno de la palabra escrita a la directora de Políticas Culturales, Mar Sancho, y a la concejala de Cultura, Marifé Santiago. Periodistas de diferentes medios, como la jefa de Culturas de El Norte de Castilla, Angélica Tanarro, tomaron el testigo, junto a integrantes de algunos clubes de lectura de Segovia.

La verosimilitud

Dueñas se muestra como una autora metódica, legado casi seguro de su experiencia docente. Confiesa que «siempre me planifico mis calendarios, estoy acostumbrada a trabajar sobre estructuras cerradas y precisas», desveló la manchega. Quizás ese academicismo no sea el secreto del triunfo en las ventas, pero sí está presente en su forma de encarar y conquistar sus novelas. Ese pasado en las aulas universitarias le ha servido para escribir ficción de manera planificada y con rigor histórico. Durante su conversación con Ana Gavin subrayó en varias ocasiones la labor de documentación y de investigación que hay detrás de 'La templanza', al igual que están presentes en sus otras dos obras.

A María Dueñas no le interesa tanto el gran contexto histórico en el que enmarca sus relatos entrecruzados y a sus personajes como la construcción de éstos a partir de los pequeños detalles: si un pantalón de aquella época tenía bolsillos o no, cómo se iluminaban si no existía la electricidad, qué y cuándo comían en esos años del siglo XIX... La autora visualiza cada uno de esos detalles durante el proceso de la escritura, los investiga, se documenta y los descarga en la narración para «dar verosimilitud al contexto»; y a ella, «tranquilidad» en la creación de las emociones.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elnortedecastilla La seducción literaria de María Dueñas conquista el primer acto del Hay Festival