La planta de biomasa pasa a manos municipales tras dos millones de inversión

El Ayuntamiento de Cuéllar ejercerá su derecho de opción de compra y adquisición de la central de producción de energía térmica alimentada con biomasa, tras la aprobación por unanimidad por parte de los miembros de la Corporación municipal.

Esta operación se puede llevar a cabo después de 17 años y más de dos millones de inversión, por lo que «no nos podemos volver atrás», según explicó el concejal de Patrimonio, Luis Senovilla, quien recordó que tras la finalización del pago de los plazos suscrita entre el Consistorio y el IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía), se realizó un alegato a favor de la adquisición de esta infraestructura, ya que de no ejercitar la opción de compra el ente quedaría capacitado para desmontar la central.

En un momento en el que las redes de calor se han generalizado como una solución global y sostenible, que ofrecen un servicio de calidad y barato, Senovilla destacó que la planta de Cuéllar fue pionera. En el caso concreto de la localidad, la planta ofrece calefacción y agua caliente sanitaria a decenas de viviendas unifamiliares, bloques de vecinos e incluso edificios públicos ,como la piscina climatizada, el pabellón polideportivo, un centro cultural y el colegio Santa Clara.

La solicitud se realizó ya el pasado 13 de mayo, y el pleno de la Corporación aprobó la opción de compra, ademásd de facultar al alcalde para la firma de los documentos necesarios y el contrato de compra-venta, así como para la realización de los trámites para la inscripción de la instalación dentro de los bienes del Ayuntamiento.

Fue en enero de 1998 cuando se firmó la escritura de financiación por terceros, donde se incluía la opción de compra que ahora se hace realidad. En ella se señalaba que el IDEA concedía al Ayuntamiento de Cuéllar el derecho de opción de compra de las instalaciones objeto del contrato, pudiendo ejercitar tal facultad en un plazo máximo de unos días, una vez finalizado el pago de cuotas. Parte del contrato se modifició en una adenda de junio de 1998 y la opción de compra se fijó definitivamente en la redacción de una nueva adenda de mayo de 2007. En ella se reconocía la deuda que mantenía el Ayuntamiento con el IDEA por los pagos no realizados por el Ayuntamiento hasta entonces, se fijaron las nuevas cuotas de pago, cercanas a los 10.600 euros mensuales IVA incluido, hasta el pasado 30 de junio, fecha a partir de la cual se contaba con un mes para ejercitar la opción de compra, que se podía realizar siempre y cuando se hubieran cumplido las obligaciones contractuales.

Tras un pago final de 7.245 euros y después de una inversión por parte del Ayuntamiento cercana a 1,5 millones de euros, la central térmica alimentada con biomasa será propiedad municipal.

Luis Senovilla detalló que se decidió llevar a pleno esta opción de compra teniendo en cuenta que toda la tramitación del expediente de la planta de biomasa ha venido realizándose con la aprobación de este organismo, por lo que se creyó conveniente que, puesto que ha sido el pleno el que ha venido ejercitando las funciones de decisión, también fuera el que decidiera sobre el último documento. La adquisición no supone ningún cambio en el funcionamiento de la planta, que actualmente está gestionada por Somacyl. El único cambio es administrativo y que se puede inscribir como un bien municipal, una vez cubierta la inversión.

Así, Senovilla señaló que se mantiene el mismo funcionamiento, a la vez que manifestó su interés de volver a retomar la puesta en marcha de un reglamento de funcionamiento para las instalaciones, aunque no de forma inminente.