Un sueño 'mini' frenado por el covid-19

Era una cita que centenares de jóvenes -los mejores talentos de hasta 12 años-, sus técnicos, árbitros y familias de toda España tenían señalada en rojo en sus respectivos calendarios. Unos, los más pequeños, por vivir su primer gran campeonato con la selección regional; otros, los técnicos, por ayudar a crecer a los pequeños baloncestistas; los trencillas por mostrar sus dotes para dirigir partidos 'grandes'; y las familias, desplazándose hasta San Fernando o viendo en directo a través de las retransmisiones de FEB a sus chicos y chicas junto a los mejores del país.

Así estaban nueve salmantinos, citados como jugadores, técnicos o árbitros por la Federación Territorial de basket para representar a Castilla y León: las jugadoras de Avenida Martha Moreno Yusta, Elena Moreno Boyero y Ángela Bejarano Rubio; los jugadores del CBTormes David Beites Martín, Darío García Delgado, Rodrigo Sánchez Parrés y Sergio Caballero Villoria; la entrenadora Andrea Galán, seleccionadora de las chicas; y el colegiado Alberto González.

Sus ilusiones

«Tenía mucha ilusión por ir ya que llevábamos un año preparándonos y habíamos hecho muy buen equipo», señala Martha Moreno, mientras que su compañera Elena Moreno expresa que «después de tantos viajes, concentraciones y nervios íbamos a vivir una experiencia inolvidable. Me haría mucha ilusión jugar un campeonato de España en un futuro»; a Ángela Bejarano le hacía «mucha ilusión conocer y jugar con las mejores niñas de España del 2008».

Sus compañeros de selección en la masculina se muestran en el mismo sentido. David Beites asegura que «tenía muchas ganas de jugar el campeonato y a la vez muchas esperanzas porque formábamos un muy buen equipo. Ahora, mi único deseo es que se posponga»; para Darío García -hijo de la exjugadora de Avenida Pilar Delgado que iba a repetir Nacional mini tras jugar el de 2019-, «este año iba muy ilusionado porque tenemos muy buen equipo y nos llevamos muy bien»; Rodrigo Sánchez tenia muchos deseos de «ganar» y además «quería conocer a todas las selecciones y hacer nuevos amigos. Y, claro, conocer San Fernando e ir a la playa con todo mi equipo a pasarlo bien. Ganar la final contra Cataluña o Madrid y cerrar acta a alguna selección»; mientras que Sergio Caballero ansiaba «pasármelo muy bien, disfrutar y trabajar duro para mejorar; aunque eso sí, con risas aseguradas porque mis compañeros son muy divertidos. Pero sin dudar que hubiese sido una experiencia inolvidable».

Andrea Galán, seleccionadora del equipo femenino, no esconde que «sentimos mucha rabia porque hemos realizado, tanto nosotros como sobre todo los niños y niñas, un gran esfuerzo durante todo el año para preparar el campeonato, y la sensación es que se han quedado sin el premio merecido por algo completamente ajeno a ellas y a todo el mundo. Ojalá se pueda hacer algo para que esta generación no se quede sin campeonato mini, aunque fuera en septiembre... porque esas 12 niñas y niños se lo merecen».

Por último, el colegiado Alberto González iba a debutar en su primer gran campeonato:«Iba a ser la primera vez que salía de la comunidad a arbitrar, mi primer campeonato, que como mucha gente me ha dicho es el mejor y el que más han disfrutado, con la mochila llena de ganas de hacerlo bien y que te vean y te de consejos todas las personas que van a estar allí viéndote. Y sobre todo las amistades que puedes hacer con el resto de gente de toda España. Aunque llegó un día que todo eso se fue cuando nos comunicaron que no se haría debido al 'bicho', y ahí te quedas un poco desanimado al no celebrarse justo cuando vas tú. Pero tienes que aprender de esta experiencia y continuar trabajando para futuras ocasiones». Esa es la lección que a buen seguro todos los salmantinos que iban a estar en este Nacional mini de San Fernando tomarán para sus seguros próximos campeonatos con la selección.