Suárez no comparte la destitución de Castaño pero mantiene el pacto de gobierno en el ayuntamiento

Por ello, Suárez ha tratado de arrojar algo de luz en la comparecencia que ha tenido lugar en la mañana de hoy para expresar que «el trabajo que ha hecho Fernando ha sido impecable durante estos cuatro años, sobre todo en momentos muy críticos con la pandemia y el turismo muy afectado». Asimismo, ha defendido la viabilidad de un congreso «muy positivo» para la ciudad que ha traído importantes ingresos a la capital. «El Congreso ha traído a la ciudad posibles inversores con motivo de desarrollo económico e industrial, para eso es importante el empleo y por tanto las inversiones. Fue un éxito en cuanto a asistencia y gasto en la ciudad», asienta.

El camino comenzaba a torcerse hace seis días cuando la idea de convertir Salamanca en Dubai se derrumbaba tras descubrir que el ahora exasesor responsable de organizar el congreso carecía de la titulación universitaria que incluyó en sus credenciales para acceder al puesto en el Ayuntamiento de Salamanca. Un hecho que ha puesto en la palestra al propio Castaño que puso su cargo a disposición del alcalde, - y este rechazó la dimisión- . «Fernando sin haber hecho nada malo puso sus cargos a disposición del alcalde porque era su responsabilidad», comenta.

Sin embargo, en el día de ayer Carbayo decidió prescindir de él dentro del equipo de gobierno tras la polémica suscitada en torno a la contratación del ya exasesor. Sin embargo, Suárez defiende que «todos los grupos políticos han sido conocedores del trabajo del asesor». Además, ha añadido que «no hay motivo para romper el pacto de gobierno que ha traído estabilidad a la ciudad».

Con las elecciones a la vuelta de la esquina, el papel de la participación de ese concejal número 14. -que ocupaba Castaño-. Con él, se da la mayoría al bloque de gobierno para aprobar sus propuestas y puede ser decisivo ese voto para llevar adelante las propuestas que ya están sobre la mesa. Así, se ha decidido que las funciones del turismo se queden en el grupo naranja de la mano de Suárez quién ha asumido que está cansada de «este juego sucio y este oportunismo».