Seguridad y protección en la Sierra

Seguridad y protección ante todo, esa es la máxima de la Mancomunidad Sierra de Francia en esta lucha contra la pandemia del coronavirus.

Desde que comenzara el confinamiento, e incluso antes, los alcaldes de los 15 municipios que forman esta agrupación (La Alberca, Las Casas del Conde, Cepeda, Garcibuey, Herguijuela de la Sierra, Madroñal, Miranda del Castañar, Mogarraz, Monforte de la Sierra, San Martín del Castañar, San Miguel de Robledo, Sequeros, Sotoserrano, Valero y Villanueva del Conde) tenían muy claro que había que seguir una serie de medidas a rajatabla para conseguir vencer al Covid-19.

Desde el primer momento manifestaron a sus vecinos la importancia de quedarse en casa y salir lo indispensable, siendo el confinamiento algo muy serio. Y lo hicieron a través de bandos, del uso de las nuevas tecnologías y de todo lo que estaba en su mano.

Las medidas de higiene también eran esenciales, por lo que distribuyeron información sobre ella. Y se dispusieron a llevar a cabo la desinfección de los pueblos de forma constante. Para ello, la Mancomunidad Sierra de Francia contribuyó entregando a cada ayuntamiento 100 litros de lejía por pueblo. Una cantidad que ya se ha entregado en tres ocasiones por lo que, hasta el momento, ya se han repartido 4.500 litros.

Junto a esa medida, explica el presidente de la Mancomunidad Sierra de Francia y alcalde de Sequeros, Mauricio Angulo, también «entregamos en un primer momento pantallas de protección a los establecimientos de esos 15 pueblos y a los trabajadores municipales». Para ello donaron al grupo Resistencia Salamanca las planchas de acetato y bobinas de filamento PLA. También se entregaron a los ayuntamientos buzos enterizos para los trabajadores.

Tras estas primeras entregas de material para la protección de personas y para la desinfección de los pueblos; la mancomunidad compró para los centros de salud de La Alberca, Miranda del Castañar y Linares de Riofrío, que son a los que pertenecen los distintos municipios, «batas desechables, gorros con mascarillas incorporadas, calzas con refuerzo para poder trabajar también en la calle y solución hidroalcohólica». Productos que ya han sido entregados y que se suman a las pantallas faciales que se les habían llevado en un primer lugar.

Ahora, la mancomunidad está pendiente de recibir las casi 4.000 mascarillas FFP2 que han sido pedidas a dos distribuidores para entregarlas -junto a los 13.500 guantes de nitrilo que ya han recibido- a los distintos ayuntamientos para que los repartan entre su población.

Además de la compra de todo este material, que ha supuesto un buen desembolso de dinero, la mancomunidad también está llevando a cabo una importante labor de asesoramiento gracias a su presidente, que es sanitario, y quien cada día recibe al menos dos llamadas de los alcaldes, concejales, alguaciles...

«Son muchas las consultas que me han realizado desde el primer momento, tanto de tipo sanitario como de cualquier otra cuestión», explica Mauricio Angulo, quien trata de resolver cualquier problema y ofrecer toda la información que puede, tanto telefónicamente como a través del grupo de 'whatsapp' que tienen de la mancomunidad.

Consultas de lo más variadas como, por ejemplo, qué hacer si viene gente a su segunda residencia durante el confinamiento, cómo llevar a cabo la desinfección de los pueblos -«porque no se trata de tirar el líquido a las calles, sino de desinfectar puertas, pomos...»- o incluso cómo hacer la solución para la desinfección en las propias viviendas. «Todo tipo de información es buena en estos momentos», añade.

Y dentro de ese asesoramiento, que Angulo considera «esencial», también se encuentra el «dar ánimos» para que «no se cree desesperanza entre la población».

Por otro lado, añade que «la seguridad es fundamental». Por ello, recuerda que aunque hayamos pasado la peor parte de la pandemia, hay que «extremar las medidas de protección» porque en los pueblos de esta mancomunidad domina la población mayor. Desde el primer momento, «todos los alcaldes han sido conscientes de que hay que tener a la gente en sus casas» y con la contención se ha conseguido que haya pocos contagios.

Pero el hecho de que una parte de la Sierra de Francia sea la zona de la provincia de Salamanca donde menos casos de contagio haya actualmente, no quiere decir que los pueblos puedan relajarse. Hay que seguir luchando contra el virus y en esta lucha, la Mancomunidad Sierra de Francia ha sido, es y seguirá siendo un aliado más.

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