Guillermo Mulero descubre a Sergio Vicente, el nuevo técnico del Aquimisa Carbajosa

De hecho, varios miembros de la plantilla le pidieron al técnico maño que siguiera: «Yo también se lo dije, por si había otra decisión. Yo quería que siguiera, pero si había otra solución no era la que él consideraba. No fue una división completa», añade.

En cuanto a esos dos partidos (Algeciras y Melilla), en los que el Aquimisa cayó por al menos 30 puntos, Mulero considera que «lo más duro es que nosotros no nos reconocemos. Noté falta de energía aunque haya detalles tácticos. Creo que la conseguimos recuperar ante Gijón a pesar de la derrota».

Mulero estuvo dos años con Sergio Vicente en el Real Madrid. «Es un entrenador muy trabajador y de lo mejor que tiene es que comprende el tipo de jugador que tiene y trata de sacar lo mejor de cada uno. Eso creo que nos va a venir bien colectivamente al equipo como individualmente. Ahora además ya tiene mucha más experiencia. Es además una persona muy honesta con la que se puede hablar, la comunicación es buena y eso es clave en los equipos. Puede hacer un buen tándem con Avelino (ayudante)».

«Cuando yo estuve con él Sergio era ayudante pero eso no creo que lo pierda ahora como primero. Además, algunos veranos he estado trabajando con él individualmente», añade Guillermo Mulero, que confiesa que ha intercambiado unos mensajes que el nuevo técnico para ponerle al día de la ciudad y el equipo.

El Aquimisa Carbajosa acumula tres derrotas seguidas «y ahora mismo estamos en el peor momento de la temporada. Pero me sorprende que a pesar de ello, el equipo no se ha desmoronado, nos veo motivados incluso a nivel de trabajo y aunque vienen partidos duros, el equipo tiene la actitud correcta para afrontar lo que viene».

Mulero analiza sobre su papel en el equipo que «estoy contento, la temporada es muy larga, y aunque he tenido varios altibajos, me encuentro bien pero sé que puedo dar más. Estoy en un buen momento personal».

En este sentido, cree que el Aquimisa debe luchar en el tramo final de la fase regular que «mantener al equipo en la categoría de forma prioritaria pero yo personalmente creo que como equipo nos merecemos jugar el play-off y debemos estar ahí».

Jugar con Doncic

Mulero también coincidió con Luka Doncic en la cantera del Real Madrid, en el júnior blanco cuando el esloveno era cadete. «Es dos años más pequeño que yo, pero ya estaba sobrado. Fue tremendo y casi que te acabas acostumbrando a las cosas que hace. Hace de lo extraordinario rutina. Tiene un don y hace cosas fáciles que los que jugamos al baloncesto sabemos que no lo son. Entrenar con él todos los días y defender es un clinic diario de baloncesto», expresa el jugador de Aquimisa que esporádicamente ha tenido algún contacto con la ahora estrella de la NBA. «No suelo tener contacto. Le mandé un 'was' cuando fue elegido para su primer 'All Star' y me contestó. Eso se agradece y habla muy bien de su persona y sé que no lo hace por cumplir, le nace así. Guarda muy buenos recuerdos de esa etapa nuestra y eso te hace aún tenerle más cariño».