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Los tropiezos en la calle están empezando a salirle caros al Ayuntamiento de Salamanca, que desde hace unos meses ha aceptado indemnizar a aquellos ciudadanos que sufren percantes por culpa de baldosas sueltas y alcantarillas que se mueven y que lo denuncian. En este caso, un nuevo incidente le va a costar más de 300 euros al consistorio por los daños que sufrió un joven en una arqueta suelta donde rompió unas zapatillas de marca y un par de calcetines de 27 euros, a lo que hay que sumar las heridas en el pie afectado.
Los hechos se remontan a marzo de 2023 cuando el denunciante, un joven con domicilio en la capital, pisó sobre una arqueta de alumbrado público que se encontraba sin tapa en la calle Pedro Cojos. El viandante sufrió una caída y diversas lesiones y daños, según publica Salamancahoy.
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El afectado llamó al Ayuntamiento inmediatamente después de la caída y desde el lugar del accidente, y habló con un técnico responsable del Servicio de Alumbrado. En la conversación se le confirmó que efectivamente la arqueta estaba en reparación y que no debía haber sido abandonada por los operarios de la empresa concesionaria municipal sin taparla o vallarla. Fue así como se la encontró el joven y lo que provocó el accidente.
Como el solicitante manifestó su deseo de reclamar los daños sufridos se le indicó la forma de proceder y se le instó a que tomara fotografías del estado de la arqueta previo a la caída. Las fotografías acompañan el expediente y son muy descriptivas.
En ellas se ven los daños físicos y materiales que había sufrido: un arañazo en el dedo gordo del pie, otro en la pierna y la rotura del empeine de una zapatilla y el calcetín del pie afectado.
Días después, el afectado adjuntó a su reclamación de responsabilidad las facturas de compra de las zapatillas y de los calcetines; no contaba con parte médico aunque las lesiones eran todavía visibles.
En su escrito, el jefe del área jurídica del Ayuntamiento asume la responsabilidad del consistorio porque «no admite mayor esfuerzo comprender que las arquetas no pueden estar sin tapa porque suponen un riesgo grave para los viandantes, y que si levantan para una reparación debe señalizarse tal riesgo adecuadamente. Como en este caso se dejó la arqueta sin tapa mientras se reparaba, sin señalización y sin presencia de los operarios, el nexo de causalidad entre los daños reclamados y el funcionamiento del servicio de alumbrado público es incuestionable».
Por este motivo, acuerda compensar por herida leve en el pie de la que no se presenta parte de curación, por lo que estimativamente se valora en una cantidad equivalente a cinco días de perjuicio básico (baremo de accidentes de tráfico de 2023), 178,55 euros.
En cuanto a los daños materiales en calzado, 144,80 euros, y calcetín, 27,79 euros; al calzado se le aplica estimativamente una depreciación por el uso y se reconoce una indemnización de 311,06 euros por el total, daños personales y materiales.
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